Argentina se mantiene a resguardo del temible mal de las vacas locas (encefalopatía espongiforme bovina), porque ya había prohibido las importaciones de productos de riesgo de Estados Unidos, donde el martes se admitió el primer caso de esa enfermedad. Mientras, fuentes oficiales indicaron que ese episodio podría tener consecuencias inesperadas sobre el comercio de carnes, donde el país es un jugador importante en el mundo, debido a que unos 35 países ya prohibieron el ingreso de productos cárnicos estadounidenses.