Unos 60.000 representantes de 1.500 organizaciones de la sociedad civil de Europa discutirán esta semana en la capital de Francia mecanismos para que este continente defienda con decisión la paz, la solidaridad y los derechos humanos.
El Foro Social Europeo que comenzará este miércoles en París y en la cercana ciudad de Saint-Denis procurará dar pasos hacia el diseño de un modelo económico alternativo a la globalización conducida por el capital, dijeron a IPS sus organizadores.
Esta búsqueda será central para los activistas que asistirán durante tres días a 270 seminarios, 55 conferencias y 287 talleres dentro y fuera de París.
Los 60.000 delegados también realizarán una revisión crítica de la política agrícola y de la situación de los derechos de las mujeres y de los extranjeros en la Unión Europea (UE), así como actividades de promoción del diálogo entre pueblos y culturas, anunciaron los organizadores.
El Foro Social Europeo concluirá este sábado con una "protesta festiva y masiva para promover "una cultura europea de paz y derechos ciudadanos", dijo el activista Pierre Khalfa, integrante del comité organizador.
"La marcha se realizará de una forma artística y activista, y unirá todos los movimientos diversos y activos del Foro en una sola celebración", agregó Khalfa.
El foro de París será el segundo europeo, tras el celebrado en Florencia, Italia, el año pasado, y de acuerdo con los principios fijados por el Foro Social Mundial fundado en Porto Alegre, Brasil, en enero de 2001.
"Consideramos al Foro Social Europeo la base europea del Foro Social Mundial y su complemento", declaró a IPS Laurent Vannini, otro de los organizadores de la conferencia en París.
En esta instancia, se preparará el aporte de la sociedad civil europea para el cuarto Foro Social Mundial, que se celebrará en enero próximo en la ciudad india de Mumbai (ex Bombay).
"Discutiremos los asuntos del Foro Social Mundial de acuerdo con los criterios europeos, y daremos a la gente y a las organizaciones de nuestro continente que no pueden asistir a reuniones en lugares lejanos la posibilidad de expresarse y de intercambiar opiniones con otras organizaciones", dijo Vannini.
El Foro Social Europeo concentrará su atención en cómo crear "un modelo alternativo de relaciones económicas y diplomáticas basadas sobre el desarrollo humano y no sobre el lucro capitalista", añadió.
El Foro también se dedicará a crear redes internacionales entre organizaciones de la sociedad civil, de modo de reforzar recíprocamente su trabajo y enriquecer la actividad común contra el neoliberalismo, aseguró Vannini.
Además, procurará promover una Europa que defiende la paz, la solidaridad y los derechos humanos, sostuvo.
Entre las instituciones participantes de todo el continente, incluidas Europa central y oriental, figuran sindicatos, organizaciones ambientalistas —como Greenpeace Internacional— y humanitarias —como Médicos del Mundo—, femeninas, de apoyo a los inmigrantes y de derechos humanos.
El programa del Foro seguirá cinco líneas de discusión. La primera es la lucha contra la guerra, e incluirá debates sobre derecho internacional, desarme mundial, globalización militar y políticas imperialistas.
La intención es proponer una nueva relación entre el Norte rico y el Sur pobre basada sobre la cooperación económica y para el desarrollo.
Una segunda línea de discusión se refiere a las amenazas sobre los derechos humanos y civiles y sobre el Tratado Constitucional que analiza la Convención Europea presidida por el ex jefe de Estado francés Valery Giscard D'Estaing.
La tercera y cuarta línea de discusión se referirán a "la lógica del lucro y la sociedad ambientalmente sustentable" y a "los procesos de la información, la cultura y la educación democráticas".
El Foro pondrá especial énfasis en el examen de los procesos de desregulación y privatización de los servicios públicos, en especial los del agua.
"Varias organizaciones no gubernamentales especializadas lanzarán una campaña para mantener el agua en el sector público", dijo a IPS Hélène Ballande, de la filial francesa de Amigos de la Tierra.
En la última línea de debates se tratará el racismo, la xenofobia y la exclusión de los inmigrantes.
