La VIII Conferencia Ministerial americana, que reunió en la sudoriental ciudad estadounidense de Miami a los 34 países miembros, finalizó el jueves, un día antes de lo previsto, con un cambio de rumbo hacia un Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA) más flexible que el diseñado originalmente por Estados Unidos. El nuevo acuerdo, que involucra a todos los gobiernos del continente excepto Cuba, habilita negociaciones directas entre naciones o bloques regionales, en lo que se considera un triunfo del planteo estratégico de Brasil en detrimento de los postulados de Washington. "Hemos llegado a un acuerdo que nos permite decir que el proceso está en marcha, hemos encontrado una fórmula para salir del estancamiento", dijo el secretario de Relaciones Económicas Internacionales argentino Martín Redrado.
