Brasil ocupará por dos años un asiento en el Consejo de Seguridad de la ONU a partir del 1 de enero de 2004. El gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva aprovechará el puesto para impulsar una reforma en el foro multilateral. La Asamblea General también eligió a Argelia, Benín, Filipinas y Rumania para ocupar asientos no temporales en el Consejo.