Un planeta de la Vía Láctea descubierto desde un observatorio venezolano llevará el nombre de Huya (Juyá), dios de la lluvia de la etnia wayúu, que habita la árida península de la Guajira, al norte de Colombia y Venezuela.
Los wayúu esperan que su dios, desde su nueva morada en las gélidas vecindades de Neptuno y Plutón, obre el milagro de remediar la sed de agua y tierras que padecen desde hace varias generaciones.
Juyá es un astro de unos 600 kilómetros de diámetro, compuesto de rocas e hielos, parte del llamado Cinturón de Kuiper, cuerpos ubicados más allá de Neptuno.
Aunque es más grande que los asteroides de su grupo, resulta un pequeño planeta, aproximadamente la cuarta parte de Plutón.
El astro fue descubierto la noche del 14 al 15 de marzo de 2000 por el investigador Ignacio Ferrín, utilizando el telescopio Schmidt con una lente de 100 centímetros de diámetro del Centro de Investigaciones de Astronomía de la Universidad de Los Andes, relató a Tierramérica el portavoz del equipo científico, Johnny Cova.
Se le llamó desde entonces Objeto 2000-EB173, hasta que hace unos días la Unión Astronómica Internacional (UAI) aceptó su nuevo nombre, indicó Cova. El apelativo fue aceptado en julio y apareció en un listado de pequeños planetas de la UAI actualizado al 7 de este mes.
Juyá demora 243 años en dar vuelta al Sol, en una órbita acentuadamente elíptica. La posibilidad de que albergue vida está descartada, pues la temperatura de su superficie es de 180 grados bajo cero, dijo Ferrín.
El planeta se formó por una lluvia de rocas, como pasó con la Tierra, según Ferrín. Por eso impulsó un nombre que reivindicase el lugar desde donde fue descubierto, Venezuela, y a sus primitivos pobladores, y que evocase a la vez la noción de lluvia.
Se apeló a la etnia wayúu por ser la mayoritaria en Venezuela. En más de 20 nombres analizados por astrónomos, antropólogos y estudiosos wayúu encabezados por Jorge Pocaterra, se eligió a Juyá, dios de la lluvia, guerrero, cazador, seductor y habitante de los espacios de más allá del Sol.
Para facilitar su uso en inglés, se cambió a Huya, sin j ni la tilde sobre la á.
Es una nueva reivindicación para nuestros pueblos y un recordatorio de nuestra existencia y de nuestras demandas, dijo a Tierramérica la dirigente wayúu Noelí Pocaterra, vicepresidenta de la Asamblea Nacional legislativa de Venezuela.
Los wayúu, llamados con frecuencia guajiros por la tierra que habitan, son la más numerosa de las 31 etnias aborígenes de Venezuela: unos 200 mil individuos del total de 511 mil que se reconocen como indígenas en este país de 24 millones de habitantes. Otros 150 mil viven del lado colombiano. Su lengua es de la familia arawak.
Los wayúu son pastores de cabras, tejedores, pescadores, recolectores de sal, comerciantes e incluso contrabandistas.
En la soleada Guajira urge superar carencias. La falta de agua es el gran problema, sea con la lluvia, la construcción de jagüeyes (lagunas) o la activación de plantas desalinizadoras, esperamos de Juyá, dios de la lluvia ahora reconocido por el mundo entero, que haga el milagro del agua, dijo Pocaterra.
* Publicado originalmente el 30 de agosto por la red latinoamericana de diarios de Tierramérica. (