La Unión Europea (UE) dejó claro que Suecia pagaría caro su decisión de no adoptar el euro como moneda única, pero el gobierno de Goran Persson subrayó que la decisión de la ciudadanía debe ser respetada.
A partir de ahora, Suecia podría perder influencia política y quedar alejada del ámbito donde se toman decisiones importantes dentro del bloque, dijo este lunes a la prensa italiana el presidente de la Comisión Europea (órgano ejecutivo de la UE), Romano Prodi.
Ochenta y dos por ciento de los 8,8 millones de suecos participaron el domingo del referendo en el que fue rechazado el euro por 56,1 por ciento de los votos, contra 41,8 por ciento de sufragios a favor de la adopción de la moneda comunitaria.
La comisaria de Ambiente de la UE, la sueca Margot Wallstrom, advirtió a sus compatriotas sobre el precio económico y político que deberán pagar por quedarse afuera de la zona conformada por 12 de los 15 países del bloque donde el euro es moneda única.
Por su parte, la canciller de España, Ana Palacio, opinó que el resultado del referendo fue una mala noticia para Europa y para Suecia.
Mientras, el canciller (jefe de gobierno) de Alemania, Gerhard Schroeder, dijo esperar que Suecia organice otro referendo pronto, pues el mercado europeo no podrá desarrollar su enorme potencial sin que todos los países del bloque tengan la moneda única.
Los suecos son los primeros en efectuar una consulta sobre el euro desde que éste se convirtió en la única moneda de circulación en 12 países europeos, en enero de 2002. Suecia, Dinamarca y Gran Bretaña son los únicos que permanecen fuera de la eurozona.
La votación se vio empañada por la muerte el jueves de la canciller Anna Lindh, una de las principales defensoras del sí al euro, acuchillada por un desconocido cuando hacía compras en un supermercado de Estocolmo.
El primer ministro Goran Persson, también defensor del sí, señaló el domingo que hay mucho escepticismo en el pueblo sueco sobre el proyecto de la unión monetaria europea, y subrayó que el resultado de la votación fue un claro mensaje que debe ser respetado.
La Comisión Europea, con sede en Bruselas, expresó su decepción por el resultado, aunque subrayó que respeta la decisión de la ciudadanía de Suecia.
Creemos firmemente que el euro, nuestra moneda, continuará dando ventajas a la economía de la eurozona. El euro le ha dado más estabilidad a las economías individuales y es un trampolín para hacer de Europa el área más competitiva y unida del planeta, señaló la Comisión en un comunicado.
La votación en Suecia perjudica el ambicioso plan de la UE de adoptar una Constitución el año próximo, que sería ratificada por todos los estados miembro.
Muchos consideran que los efectos del rechazo sueco al euro también se sentirán en Gran Bretaña, donde está previsto un nuevo referendo sobre el asunto a instancias del primer ministro Tony Blair, aunque no se ha fijado aún una fecha.
El líder liberal Graham Watson, que hizo campaña por el sí en Suecia, opinó que el gobierno de Gran Bretaña debería aprender la experiencia sueca.
Suecia votó por no adherirse al euro porque el gobierno no pudo convencier a la población de los beneficios de la unidad europea. Los argumentos de los potenciales beneficios económicos no convencieron al pueblo sueco. Ahí hay una lección para Tony Blair, dijo Watson a IPS.
Los partidarios británicos del no señalaron que el resultado del referendo en Suecia demostró que será casi imposible una votación favorable en Gran Bretaña, donde la oposición a la moneda única es todavía mayor.
Los suecos pudieron ver los problemas en la zona del euro y no quisieron perder el control de la economía, ni aceptar menos crecimiento o un desempleo alto, dijo a IPS el director de la campaña por el no en Gran Bretaña, George Eustice.
El portavoz sobre Asuntos Exteriores del opositor Partido Conservador de Gran Bretaña, Michael Ancram, coincidió con Eustice.
Los medios y los partidos políticos apoyaban la adhesión al euro. Pese a ello, los suecos decidieron no renunciar a su propia moneda, dijo a la cadena brtiánica BBC.
Estar fuera del euro no dejará a Gran Bretaña aislada de Europa. La campaña de Blair en favor del euro se ve perjudicada (por el referendo en Suecia). Nadie puede decir ahora que el euro es inevitable, añadió.
En Dinamarca, que rechazó la moneda única europea hace tres años, el primer ministro Anders Fogh Rasmussen insistió en que el resultado del domingo no tendrá impacto en la opinión pública danesa.
Los daneses tomarán su decisión de forma independiente a lo que sucedió en Suecia, aseguró Rasmussen, quien encabeza una nueva campaña por el euro.