Una ola de suspicacia despertó en México el anuncio de que la pobreza disminuyó por primera vez en 20 años, realizado por el gobierno de Vicente Fox cuando faltan dos semanas para las elecciones legislativas.
Según un estudio oficial elaborado con inédita celeridad, que fue difundido el miércoles, de 2000 a 2002, 3,4 millones de mexicanos dejaron atrás la pobreza extrema.
Fox asumió el gobierno en 2000.
En México se define como pobreza extrema la situación de quienes reciben ingresos insuficientes para adquirir lo que se considera una canasta básica, o sea menos de unos 65 dólares por mes en áreas urbanas, y menos de 47,9 dólares por mes en áreas rurales.
Expertos en medición de pobreza, organizaciones no gubernamentales (ONG) y hasta miembros de un comité técnico encargado del tema en un ministerio pusieron en duda el anuncio, que además contradijo estudios independientes.
De 2000 a 2002, los pobres extremos tuvieron por primera vez en 20 años un ligero repunte en sus ingresos, según el informe de la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de Hogares, del estatal Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI), cuya credibilidad pocos habían puesto en duda antes.
Estudios anteriores similares del mismo organismo tardaban hasta dos años en difundirse a partir del levantamiento de los datos, pero esta vez, los resultados se presentaron siete meses después de recoger los datos, un récord mundial que llama a desconfianza, dijo Julio Boltvinik, investigador del Colegio de México y experto en medición de pobreza.
Fox sostuvo que el país tiene hoy el menor porcentaje de pobres de los últimos años, gracias a sus políticas sociales y al esfuerzo de todos.
El anuncio del mandatario, hecho con gran despliegue, precedió a la elección que se realizará el 6 de julio para renovar de forma íntegra los 500 integrantes de la Cámara de Diputados.
En las encuestas, el Partido Acción Nacional de Fox y el opositor Partido Revolucionario Institucional (gobernante de 1929 a 2000) tienen similares porcentajes de intención de voto.
Lo dicho por el presidente sobre la pobreza crea muchas dudas y pocos dan crédito, pues vienen elecciones y la gente no siente que haya cambios en la economía de las familias, dijo a IPS Carolina Chapa, de la ONG Acción Social.
Es una burla eso de que bajó la pobreza, ¿dónde se ve eso? Por favor, que no nos mienta el presidente, comentó Patricio Acosta, un taxista de la capital.
En 2000, el producto interno bruto de México creció más de siete por ciento, en 2001 decreció 0,4 por ciento y en 2002 repuntó 0,9 por ciento.
Un reciente estudio de la privada Universidad Iberoamericana afirmó que la pobreza en México aumentó tres por ciento de 2000 a 2002.
Por el momento no se pueden tomar al pie de la letra los datos del INEGI, aún hay que evaluarlos, opinó el investigador Rodolfo de la Torre, de la Universidad Iberoamericana y miembro del Comité Técnico para la Medición de la Pobreza de la Secretaria (Ministerio) de Desarrollo Social.
El analista financiero Enrique Quintana explicó que lo anunciado por Fox sólo significa que 3,4 millones de mexicanos lograron subir sus ingresos mensuales en alrededor de 1,5 dólares de 2000 a 2002.
Ese pequeño aumento, suficiente para dejar de ser considerado pobre extremo, se debió al aumento del trabajo informal en la economía, la llegada de mayores remesas de emigrantes que viven en Estados Unidos, y el incremento de los subsidios que entrega el Estado a los más pobres, afirmó.
Estudios oficiales reconocían hasta el mes pasado que la pobreza en México venía en aumento desde los años 80, y aun con la pequeña inflexión que anunció el INEGI, más de la mitad de los 100 millones de habitantes del país siguen en la pobreza.
Los hogares mexicanos siguen en general con los niveles de ingreso de los años 80, afirmó Boltvinik.
El Banco Mundial informó en 1999 que los países con peor distribución del ingreso en América Latina eran entonces Brasil, Chile y México.
El INEGI indicó en su último estudio que el 10 por ciento más pobre del país recibe 1,64 por ciento del ingreso total, mientras el 10 por ciento más rico recibe 35,5 por ciento.
Para Sergio Sarmiento, columnista del diario Reforma, es contradictorio que los mismos analistas que en el pasado han usado información del INEGI para criticar las políticas del gobierno, cuestionen las cifras de ese organismo cuando muestran algo positivo.
Hay un grupo de políticos y especialistas que viven de la pobreza y que necesitan que ésta se mantenga, porque así benefician sus intereses o sus posiciones ideológicas, alegó.
El plan de desarrollo del gobierno de Fox para el período 2001- 2006 prevé que, si se cumple todo lo programado y los siguientes gobiernos trabajan de forma responsable, para 2025 la pobreza habrá disminuido drásticamente.
Pero no bastará que se cumpla todo lo programado y que se trabaje con responsabilidad, pues la marcha de la economía de México depende en gran medida de la de Estados Unidos, advirtió Quintana.
Más de 90 por ciento del comercio exterior mexicano se realiza con Estados Unidos.
La difusión del estudio del INEGI en momentos electorales recibió duras críticas de políticos opositores, quienes afirmaron que el usa organismos del Estado para beneficiarse políticamente.
Según firmas encuestadoras, es probable que las elecciones legislativas mantengan, a la mitad del período de seis años para el que Fox fue electo, la relación de fuerzas del actual Congreso, con mayoría relativa del PRI, seguido del PAN, y en un lejano tercer lugar el izquierdista Partido de la Revolución Democrática.
Ya se verá en las elecciones si los mexicanos creyeron o no a Fox en eso de la disminución de la pobreza, o si el asunto no pasará de ser una vacilada (engaño), expresó Chapa.
