La onerosa factura del agua contaminada en América Central recae sobre niños y niñas víctimas de un ambiente degradado.
Cinco millones de menores de 14 años fallecen al año por males relacionados con el ambiente, 80 mil en América Latina y el Caribe, sostiene la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Sólo por falta de agua potable y saneamiento, enfermedades como la diarrea matan a 1,3 millones de niños y niñas menores de cinco años en el mundo.
Según el Indice de Pobreza del Agua, América Central se ubica en un nivel moderado, sin embargo, el desabastecimiento de agua y la falta de higiene conforman un cuadro explosivo junto a la gran cantidad de menores que permanecen subalimentados por años.
En América Central, la desnutrición y un medio ambiente degradado cierran un círculo vicioso que convierte a seres con su sistema inmune aún en formación en el sector más vulnerable a las infecciones, dijo a Tierramérica Osvaldo Legón, asesor de salud del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).
En Guatemala, por ejemplo, la crisis del agua provocó en 2001 3.499 muertes por diarrea, de ellas 1.151 fueron de menores de cinco años, según fuentes oficiales de ese país.
En El Salvador, la diarrea mata anualmente a 12.000 niños por beber agua contaminada, según la no gubernamental Amigos de la Tierra.
Los niños del mundo se reunieron en coincidencia con el Tercer Foro Mundial del Agua que se prolongó hasta el 23 de este mes en Japón y que busca frenar la crisis global del vital líquido.
El Día Mundial de la Salud este año (7 de abril), ha sido también dedicado a la infancia: se buscará promover un medio ambiente libre de tóxicos, seguro y sano para los niños.
*Publicado originalmente el 22 de marzo por la red latinoamericana de diarios de Tierramérica. (