El temor de los mercados financieros a la llegada al gobierno de Brasil de Luiz Inácio Lula da Silva, del izquierdista Partido de los Trabajadores, quedó en el olvido o, al menos, se aminoró a su mínima expresión. El presidente electo brasileño ha dado señales de prudencia, según analistas, en especial con el nombramiento del moderado Antonio Palocci como su próximo ministro de Economía.