/Integración y Desarrollo/ DESARROLLO: Premio a indígenas peruanos por proyecto turístico

Un proyecto de desarrollo turístico con responsabilidad social realizado por indígenas peruanos fue premiado en un concurso internacional realizado en la capital alemana.

Los indígenas fueron galardonados pasado con el premio «To Do! 2001» en la edición número 36 de la Exposición Internacional de Turismo de Berlín, de la que participan unos 10.000 delegados de 181 países desde el domingo pasado hasta el miércoles.

El encuentro fue organizado por el Instituto para el Turismo y el Desarrollo de Alemania y está apoyado por el Ministerio Federal Alemán de Cooperación Económica y Desarrollo y la firma Berlin Fair Company.

Tres proyectos independientes, elegidos entre un total de 20 de 14 países, fueron distinguidos por el jurado. Los tres tienen el propósito de fomentar el turismo para favorecer el desarrollo de aldeas y localidades pobres.

La agencia turística indígena «Expediciones Wanamei», de la meridional ciudad peruana de Cusco, fue uno de los ganadores.

También fue reconocido el monasterio budista Tengboche, en el montañoso Nepal, y un proyecto de turismo y desarrollo de la localidad de Sreekandamangalam, en el sudoriental estado indio de Kerala.

La experiencia de los tres ganadores es que «los proyectos de turismo con responsabilidad social son verdaderamente capaces de contribuir al alivio de la pobreza y al desarrollo en paz», dijo el presidente del Instituto para el Turismo y el Desarrolllo, Armin Vielhuber.

«Expediciones Wanamei» pertenece a ocho comunidades indígenas de Perú y lleva el nombre de un árbol sagrado de Cusco, ciudad incorporada a la lista del patrimonio mundial de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura.

Cusco, ubicada en los andes peruanos, fue fundada por el gobernador inca Pachacutec como un centro urbano con funciones religiosas y administrativas, y en la actualidad es el principal centro turístico del país.

Cada año, medio millón de turistas visitan la ciudad y de allí emprenden excursiones a las ruinas de Machu Picchu, el llamado «Camino del Inca» y las zonas amazónicas.

«Expediciones Wanamei» organiza excursiones con responsabilidad social y ambiental a los territorios tradicionales de las tribus harakmbut, yine y matsinguenga, a lo largo del río Madre de Dios.

A estas tribus se las consideró siempre el último escalón de la jerarquía social peruana y sus productos agrícolas nunca tuvieron acceso al mercado local.

Pero las cosas cambiaron cuando una comisión conjunta de las tribus comprendió que debía no sólo enfocar su atención a la administración sustentable del ambiente, sino también al turismo.

Así, en 1999 las comunidades indígenas decidieron crear la agencia «Expediciones Wanamei», que cuenta con sus propios guías, que acompañan a los turistas interesados en conocer las comunidades nativas.

El segundo ganador fue el monasterio Tengboche que, situado a 4.000 metros de altura, es el centro espiritual y cultural del grupo étnico sherpa, en la región nepalesa del Monte Everest.

Las autoridades del monasterio budista resolvieron construir hace dos años, con la colaboración del arquitecto Michael Schmitz, el «Centro Tengboche», una atracción turística que procura lograr el desarrollo de los habitantes de la zona.

Los visitantes obtienen información básica sobre el budismo y la cultura sherpa, además de acceder a artículos tradiconales como palos de incienso originales, té curador, y obras de arte.

El monasterio está abierto a toda clase de visitantes y el dinero recabado con las ventas y las visitas es en parte usado para la educación de futuros monjes, proyectos ambientales y medidas para fortalecer la cultura sherpa.

Por último, el proyecto de Sreekandamangalam, de India, es conducido por una fundación privada, «Proyectos BASIS», con 30 empleados, que fue fundada en 1990 por Mathew y Leelamony Moozhiyil, un agrónomo y una enfermera originarios de Alemania.

BASIS fue en su comienzo un proyecto agrícola en India que buscaba un nuevo acercamiento con la población local y alternativas al monocultivo de caucho en Kerala.

El objetivo es ahora contribuir a a seguridad alimentaria de la población mediante la creación de cultivos mixtos adaptados a la zona, incluyendo nueces, papaya, plátano, canela y arroz, así como promover iniciativas propias y fomentar la autonomía de la población, explicó Mathew Moozhiyil.

Gracias al proyecto, la población local interesada en entrenamiento vocacional tiene la posibilidad de adquirir capactiación adicional para asegurarse su susbsitencia, añadió.

BASIS ofrece capacitación sobre técnicas agrícolas, zurcido, producción de muebles y herramientas, encuadernación y actividades culturales como la danza. (FIN/IPS/tre-eng/yr/jrc/rp-ff/dv/02

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe