(Arte y Cultura) CINE-JAMAICA: Los 30 años de un clásico

La película ”Caiga quien caiga” (The Harder They Come), una clásica historia urbana jamaiquina estrenada en 1972, cumplirá 30 años en junio con un publicitado reestreno en la localidad balnearia de Ocho Ríos.

Los promotores del acto cultural procuran revivir el marco histórico en que se filmó el mejor trabajo del director y guionista Perry Henzell, y han invitado ”a todas las personas involucradas con la película”, dijo Justine Henzell, hija del realizador.

La exhibición tendrá lugar en el parque temático Island Village, propiedad del magnate de la industria discográfica Chris Blackwell.

Perry Henzell, de 66 años, llevó a cabo el trabajo con un presupuesto de 200.000 dólares en un plazo de dos años, rodando en algunos de los barrios más pobres de Kingston, la capital de Jamaica.

”Caiga quien caiga”, como se la conoció en español, no fue un gran éxito internacional, pero obtuvo suficiente difusión para dar a conocer la cultura jamaiquina fuera de fronteras, en especial la música reggae, que comenzaba a llamar la atención de estrellas del pop como Al Green, The Rolling Stones y Paul Simon.

Quienes vieron el filme cuando se estrenó coinciden en que no ha perdido vigencia. ”Algunos de los hechos relatados en la película siguen sucediendo hoy en Jamaica”, subrayó la realizadora Sally Porteous.

Don Topping, un locutor que hizo el papel de disc jockey en el filme, opina de igual modo. ”Basta agregar la inflación y se estará hablando de la Jamaica actual”, sostuvo.

Henzell, un jamaiquino blanco de padres procedentes de Antigua y Barbuda y Trinidad y Tobago, reflejó a la perfección la situación social de la isla en el guión escrito en 1969.

Autor de inmumerables anuncios publicitarios para la televisión, Henzell anhelaba un desafío mayor. ”Me había aburrido de escribir propaganda, quería hacer una película”, dijo el director en una entrevista en 1995.

Echó mano entonces a sus recuerdos de infancia para hallar al héroe de su historia, desempolvando las hazañas de Ivanhoe ”Rhygin” Martin, un delincuente de origen rural que aterrorizó Kingston en los años 40 y fue muerto cuando intentaba escapar a Cuba abordando un barco bananero.

Con la primera asignación de fondos, reunidos por influyentes miembros de la clase media jamaiquina, y tras una reformulación del guión en colaboración con el dramaturgo Trevor Rhone, Henzell comenzó a filmar la que pensó se llamaría ”A Hard Road to Travel” (Un duro camino por recorrer).

El compositor Jimmy Cliff, por entonces ascendente estrella del reggae, protagonizó al antihéroe Ivan y escribió la música de la obra.

El resto del elenco se conformó con actores de teatro experimentados y otros sin ninguna experiencia, como Carl Bradshaw, quien encarnó al rival de Ivan, Jose.

Bradshaw, un ex atleta que representó al país en los Juegos Panamericanos, fue reclutado por la esposa de Henzell, Sally, quien creyó ver en el deportista las condiciones ideales para el papel.

Aunque en el guión original Jose tenía una modesta participación, el personaje fue creciendo durante los dos años de filmación.

Intérpretes y compositores de reggae como Toots and The Maytals, y Desmond Dekker and The Aces acompañaron en escenas menores a Cliff, cuyos temas ”Many Rivers to Cross” y ”Sitting in Limbo” hicieron de la banda sonora del filme un aspecto tan memorable como sus diálogos.

Cuando finalmente se estrenó en Kingston, una muchedumbre se congregó en el Carib Theatre, impidiendo el acceso de los protagonistas y productores.

La recepción no fue tan cálida en el exterior. Aunque popular entre los caribeños residentes en Gran Bretaña y América del Norte, los extranjeros que vieron el filme fueron sobre todo seguidores de la música y la cultura rastafari de Jamaica.

”Caiga quien caiga” impresionó al jurado del Festival de Cine de Venecia, que la premiaron como Mejor Opera Prima, y continuó atrayendo multitudes en su país.

Henzell nunca logró repetir el éxito de su primera película, y si bien asegura estar cansado de hablar de ella, planificó una segunda parte.

Pero el proyecto jamás se llevó a cabo por falta de apoyo financiero y por la frágil salud del realizador, que padece cáncer de próstata. (FIN/IPS/tra-en/hw/ml/lp/dc/cr/02

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