La gestión de los recursos hídricos y la prevención y atención de los desastres naturales son la principal preocupación ambiental de Iberoamérica, sostuvo el Primer Foro de Ministros de Medio Ambiente del área en La Toja, España.
El Foro, reunido los días 21 y 22, fue convocado dentro de las actividades preparatorias de la XI Conferencia Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno, convocada para el 25 y 26 de noviembre en Lima, Perú.
Los participantes aconsejaron la creación de un sistema iberoamericano de diagnóstico, prevención y detección de desastres naturales, que incluya previsiones de ayuda automática a los países que resultaren afectdos.
Los ministros y funcionarios resolvieron también convocar una conferencia de funcionarios responsables de la gestión de los recursos hídricos para discutir planes de acción.
Esos planes deberán incluir la organización de seminarios sobre la gestión de cuencas hidrográficas y la participación ciudadana, la cooperación en cuencas transfronterizas y la integración en la planificación hidrológica de otros recursos naturales de las cuencas.
Las conclusiones de la conferencia especializada deberán incluir el análisis económico de los servicios relacionados con el agua y mecanismos de financiación y de las experiencias sobre el incremento de las disponibilidades de recursos hídricos, atendiendo al reciclaje y reutilización de aguas.
La conferencia también considerará el establecimiento de metodologías comunes para la recolección y tratamiento de datos y el análisis comparativo de las legislaciones e instituciones existentes en la Comunidad Iberoamericana de Naciones.
En cuanto a las catástrofes naturales, los funcionarios reunidos en La Toja se concentraron en analizar el cambio climático, la lluvia ácida, el agujero de ozono, la desertización, las plagas y epidemias y los fenómenos climáticos como El Niño y La Niña.
Los funcionarios exhortaron a todos los países iberoamericanos a ratificar en el corto plazo el Protocolo de Kyoto, sobre gases invernadero, y el de Cartagena de Indias, sobre bioseguridad, para acelerar su puesta en vigor.
Así mismo, consideraron de vital importancia el impulso de la reforestación y la recuperación de prácticas agrícolas ecológicamente saludables como medidas de lucha contra la desertización.
El espíritu que animó a España a hospedar el Foro fue «el de explorar fórmulas de colaboración e intercambio de experiencias, iniciativas y proyectos, que nos sean mutuamente provechosos», dijo Jaume Matas, ministro español de Medio Ambiente.
Ese provecho debe servir tanto para resolver los problemas de cada país como para contribuir, «desde una perspectiva iberoamericana, a la solución de los problemas ambientales globales», agregó.
De los 21 países de habla española y portuguesa de España y América, nueve estuvieron representados por sus ministros u homólogos: Brasil, Colombia, Cuba, España, México, Perú, Portugal, República Dominicana y Venezuela.
Los 12 restantes fueron representados por funcionarios de menor rango y diplomáticos acreditados en España.
Matas destacó que el óptimo resultado del Foro demuestra que la Comunidad Iberoamericana puede y debe contribuir desde su peculiaridad y diversidad con un enfoque propio a la configuración de las políticas ambientales internacionales.
Para ello, deben coordinar esfuerzos para configurar con un enfoque propio las políticas ambientales internacionales y, así, lograr un nuevo modelo de desarrollo más sustentable y una globalización más humanizada y solidaria.
El Segundo Foro fue convocado para octubre de 2002 en República Dominicana, que albergará a la XII Cumbre Iberoamericana. (FIN/IPS/td/mj/en/01
