El precio internacional del cobre mantiene su tendencia a la baja, acompañando los avatares de la economía mundial, pero los países productores y los analistas confían en que se recupere a partir de septiembre.
La libra de cobre se cotizó este lunes en la Bolsa de Metales de Londres a 74,48 centavos de dólar, una leve caída respecto de los 74,72 centavos de dólar del viernes último.
El promedio anual de los precios del cobre llegó a 78,67 centavos de dólar por libra, que se compara desfavorablemente con el promedio de 82,29 centavos de dólar en que se cotizó la libra durante 2000.
Analistas de la gubernamental Comisión Chilena del Cobre (Cochilco) atribuyeron el retroceso de los últimos días a la caída de las perspectivas de crecimiento económico de Europa, evidente por la sorpresiva reducción de 0,25 puntos porcentuales de la tasa de interés por el Banco Central Europeo la semana pasada.
Las fuentes de Cochilco mencionaron también las nuevas señales de deterioro de la economía de Japón entre los elementos que juegan contra la demanda de materias primas.
Chile, el mayor productor mundial de cobre, que aporta alrededor de 36 por ciento de las existencias mundiales del metal, está ajustando sus planes fiscales debido al menor precio del producto.
A finales de 2000, el gobierno de Ricardo Lagos propuso un financiamiento del presupuesto del Estado sobre la base de un precio del cobre de 88 centavos de dólar la libra, que ahora redujo a 80 centavos.
La propuesta gubernamental se debió a un optimismo generalizado, pues tanto los países productores como las transnacionales y los analistas mineros apostaban para 2001 una cotización del cobre de entre 90 y 95 centavos de dólar por libra.
Esas previsiones fueron equivocadas, porque «nadie esperaba que la economía de Estados Unidos» tuviera un descenso «tan importante en un periodo tan corto», dijo el chileno Marcelo Awad, director comercial corporativo de Antofagasta Minerals.
«Estados Unidos representa 25 por ciento de la economía mundial y cualquier problema que tenga afecta el consumo de cualquier producto, entre ellos el cobre», añadió Awad.
El peor mes de este año para el precio del cobre fue abril, en coincidencia con los informes del Banco Mundial sobre una caída del crecimiento del producto de los países industrializados, de 3,6 por ciento en 2000 a solo 1,6 por ciento en 2001.
La virtual recesión en Estados Unidos enlentecerá este año la expansión de la economía mundial a 2,2 por ciento, casi la mitad del cuatro por ciento registrado en 2000, según el organismo internacional.
El cobre es una de las materias primas que mejor refleja el ritmo de la actividad productiva mundial por su demanda en áreas clave como la industria automotriz, la construcción y la energía eléctrica.
Para Awad, los problemas del cobre son de carácter temporal, pues el metal «sigue siendo esencial en el largo plazo para el desarrollo de los países».
«Estoy seguro de que vamos a tener una recuperación rápida del precio hacia fines de año, de septiembre en adelante», dijo el experto.
Según Awad, en el último trimestre del año la libra de cobre llegará a cotizarse a alrededor de 85 centavos de dólar, lo cual representará una recuperación de 10 centavos en relación con la cotización actual.
Tanto Cochilco como la Corporación del Cobre (Codelco) de Chile tienen expectativas de un mejoría de los precios en el segundo semestre, por una mayor demanda de Europa y una caída relativa en la oferta.
Según las últimas estadísticas mundiales suministradas por Cochilco, la producción total de cobre de mina fue en 1999 de 12,36 millones de toneladas, de las cuales correspondieron a Chile 4,38 millones.
El segundo productor mundial en 1999 fue Estados Unidos, con 1,59 millones de toneladas, seguido por Indonesia, con 770.900 toneladas, Canadá (614.200), Perú (523.700) y Rusia, con 510.000.
Otros productores importantes son China, Australia, Polonia, México y Zambia, según las cifras de 1999.
Iván Valdés, director de Estudios de Cochilco, señaló que la producción de los concentrados de cobre en Occidente tendrá un aaumento de su producción que alcanzará un promedio anual de tres por ciento en el periodo 1999-2005.
En América Latina el incremento anual para ese periodo será de cinco por ciento, el más alto del mundo en términos de regiones, ya que los mayores proyectos de explotación y ampliaciones de minas se localizan en Chile y Perú, así como en Argentina, que acaba de ingresar a esta actividad productiva. (FIN/IPS/ggr/mj/if/01
