El socialdemócrata Hipólito Mejía triunfó en todas las provincias de República Dominicana y sólo le falta una décima de punto porcentual para alcanzar la Presidencia sin necesidad de aguardar la segunda vuelta electoral.
Mejía, del opositor Partido Revolucionario Dominicano (PRD), sumó este miércoles 49,9 por ciento del total, cuando se llevaban escrutados 97 por ciento de los votos emitidos en la víspera, de acuerdo con el undécimo boletín de la Junta Central Electoral.
El candidato del PRD proclamó su victoria, mientras sus partidarios se concentraban frente a su domicilio en Santo Domingo para celebrabar un resultado que dan por seguro. Mejía, de 59 años, aseguró haber logrado más de 50 por ciento de los votos.
Mejía debe lograr la mayoría absoluta de los sufragios emitidos para ganar la Presidencia en la primera vuelta. En caso contrario, se enfrentaría nuevamente el 30 de junio con quien hubiera quedado segundo en la jornada del martes.
Danilo Medina, del gobernante y centrista Partido de la Liberación Dominicana (PLD), y el siete veces presidente Joaquín Balaguer, del conservador Partido Reformista Social Cristiano (PRSC), los dos principales rivales de Mejía, no reconocieron el triunfo de éste.
"Si él (Mejía) ganó, que lo proclame la Junta Central Electoral". Mientras no se tenga el dictamen oficial, "nadie se debe proclamar ganador", advirtió Jacinto Peinado, candidato del PRSC a la vicepresidencia.
Los portavoces de Medina, que lucha voto a voto con Balaguer por el segundo puesto, también señalaron que es preciso aguardar el final del escrutinio.
Así mismo, el presidente de la Junta Central Electoral, Manuel Morel, informó haber pedido al PRD que esperara el fallo oficial para declararse ganador.
Morel afirmó que las elecciones, a las que fueron convocadas más de cuatro millones de personas, se desarollaron con normalidad, sin incidentes graves.
Agregó que la concurrencia a las urnas fue masiva. El voto es obligatorio en República Dominicana.
"Creemos que la voluntad del pueblo dominicano se ha manifestado plenamente en las urnas. Hemos sido elogiados por todos los organismos internacionales, cuyas ponderaciones fueron altamente positivas", dijo Morel.
Los analistas dan por descontada la alianza entre el PLD y el PRSC para el caso de que la competencia por la Presidencia deba dirimirse en segunda vuelta.
El acuerdo entre esas dos fuerzas arrebató en 1996 el triunfo al PRD, cuyo candidato, José Peña Gómez, había obtenido mayoría relativa en la primera vuelta. Los votos de los seguidores de Balaguer dieron la victoria en la segunda ronda al actual presidente, Leonel Fernández, del PLD.
El resultado de la votación del martes confirmó el malestar de gran parte de la población con el gobierno de Fernández, que privilegió el sector turístico y la industria tecnológica, pero sin otorgar igual tratamiento a la agricultura, base tradicional de la economía dominicana.
El agrónomo Mejía logró un amplio apoyo en el interior del país, tras una campaña electoral en que se comprometió a mejorar la situación de los campesinos.
La economía dominicana creció ocho por ciento en 1999, el mejor resultado en América Latina, aunque la desigual distribución del ingreso no permitió llevar a toda la población los beneficios del auge económico.
Mejía, que en 1978 comenzó su trayectoria política como ministro de Agricultura del gobierno de Antonio Guzmán, del PRD, combatió la política de apertura comercial y de privatizaciones de Fernández, aunque ha puntualizado que no propone "volver al pasado".
Su compañera de fórmula es Milagros Ortiz Bosch, que podría ser la primera mujer en la vicepresidencia del país.
El rival histórico del PRD es el PRSC, y especialmente el líder de ese partido, Balaguer, de casi 94 años, un protagonista por momentos excluyente de la política dominicana en los últimos 40 años.
Balaguer desempeñaba en 1961 la Presidencia como "hombre de paja" del dictador Rafael Trujillo, llamado "El Benefactor", cuando éste fue asesinado por conspiradores estimulados por la CIA (Agencia Central de Inteligencia) de Estados Unidos.
Exiliado en 1962, Balaguer volvió a República Dominicana después del golpe de Estado que derrocó a Juan Bosch, del PRD, y de la intervención militar de Estados Unidos que en 1965 puso fin a una guerra civil.
En 1966 derrotó a Bosch en elecciones y comenzó su segunda presidencia, a la que agregaría luego otros cinco mandatos, hasta 1996.
Ahora, ciego y afectado por una flebitis que no le permite mantenerse en pie, Balaguer aguarda el resultado final de los comicios del martes con la esperanza de lograr una nueva oportunidad. (FIN/IPS/ap/ff/ip/00