El teatro de pantomima fue en una época un acontecimiento social en Jamaica y la última producción del género aspira a varios premios, pero el público favorece a producciones más convencionales.
"Bugsie, the Millinnium Bug", estrenada en 1999, es candidata a seis premios Actor Boy, la versión jamaiquina de los Tony en Estados Unidos.
Si se tiene en cuenta que 1999 fue un año opaco para el teatro local, "Bugsie" puede ser ser vista como una señal auspiciosa para la pantomima. Sin embargo, la autora de la obra, Bárbara Gloudon, cree que la inclusión de "Bugsie" entre los espectáculos propuestos para el premio es sólo un gesto simbólico.
"La pantomima ha sido frecuentemente propuesta, pero nunca ganó el Actor Boy. Yo sólo las tomo como un reconocimiento", dijo Gloudon.
"Bugsie" es candidata al Actor Boy en las categorías de mejor iluminación, escenografía, vestuario, argumento, música e intérprete femenina. Pero nada de eso impresiona a Gloudon, quien considera que el teatro de pantomima es subestimado por los jurados.
"Creo que hay mala fe hacia ella, porque la pantomima es escrutada más que cualquier otro género", dijo. "Como en el caso del gobierno, es allí donde hay que atacar".
"No es así", replicó el veterano crítico teatral Michael Reckord, quien tambien escribió una obra para el teatro de pantomima.
En opinión de Reckord, la calidad del género ha declinado considerablemente, con la consiguiente pérdida de interés para el público, que ahora prefieren ver producciones de menor elaboración.
"La gente disfruta menos de la pantomina porque ésta ha tenido altos y bajos con el correr del tiempo. La magia que hizo clásicas las primeras producciones se ha perdido en los últimos años. Gloudon ha escrito más de 10 de las últimas 16 obras de pantomima, lo que llevó al género a la monotonía", pese a la calidad de la autora, señaló Reckord.
El teatro de pantomima no atrae a los jóvenes, pero conserva popularidad entre los adultos, y es aún la joya de la corona en el movimiento teatral jamaiquino.
Tradicionalmente, aparece en carteleras al día siguiente de Navidad y allí permanece cuatro meses. "Sigue atrayendo mucho público todos los años y todavía es el espectáculo más importante del calendario local", reconoció Reckord.
Algunos de los actores jamaicanos más celebrados deben su renombre a la pantomima, que atrajo a multitudes en la época colonial, que se prolongó hasta 1962. El arte era una atracción importante para los británicos que gobernaban la isla.
Louise Bennett, considerada la madre del arte popular de Jamaica, y junto con ella, Ranny Williams y Lois Kelly-Miller, triunfaron en el teatro de pantomima e influyeron en la audaz generación que emergió en el teatro de la isla en los años 60 y 70.
Gloudon concedió en una entrevista que la pantomima es considerada "un género para gente vieja". Pero los productores de "Bugsie", empeñados en acabar con esa idea, se esforzaron por ganar el público joven.
"Esta vez hablamos el idioma de la gente", dijo Gloudon. "Bugsie", que presenta la música y el colorido tradicionalmente asociado con la pantomima, compite con las producciones teatrales más exitosas de 1999 por los premios Actor Boy, que serán entregados el próximo martes, en Kingston.
Una de esas obras, el musical "Breadfruit Kingdom", presenta un record de 14 candidaturas, tras convetirse en uno de los espectáculos de mayor éxito en los últimos años.
A continuación aparece "Laugh Jamaica", con nueve nominaciones, mientras que el drama "Love and Marriage and New York City" competirá en ocho categorías.
Gloudon mantiene su escepticismo. "Si ganamos, bueno, lo logramos. Y si perdemos…, el espectáculo debe continuar", declaró. (FIN /IPS/tra-eng/hc/da/ego/ff/cr/00