La comunidad indígena u'wa, de Colombia, denunciará ante la ONU y la OEA el desalojo violento de 26 de sus miembros de un campamento de la multinacional Occidental Petroleum Co., en un territorio que reivindican como propio.
Roberto Pérez, presidente del cabildo indígena (consejo de gobierno) de los u'wa, dijo a IPS que la operación de desalojo, realizada por la policía este martes, dejó varios heridos y tres desaparecidos. Las fuerzas de seguridad habían restringido desde el sábado el acceso al lugar e impedido el ingreso de alimentos.
La policía había rodeado el campamento desde el día 19 "cuando nos llamaron a desocupar pacíficamente el lugar y les dijimos que resistiríamos cualquier intento de desalojo de nuestro territorio", afirmó Pérez, quien coordina una protesta que se realizará en Caracas y el sudeste colombiano.
El líder indígena afirmó que su comunidad denunciará a Occidental Petroleum Co., conocida como Oxy, y al gobierno de Colombia ante las Comisiones de Derechos Humanos de la ONU (Organización de las Naciones Unidas) y de la OEA (Organización de Estados Americanos), entre otras instancias internacionales.
"Con este proyecto, Oxy y el gobierno quieren destruir la comunidad u'wa al traer a nuestra tierra la explotación de petróleo violando nuestra cultura y costumbres", afirmó Pérez.
Los u'wa se oponen a la explotación del petróleo, al que consideran "la sangre de la madre tierra" y han amenazado con el suicidio colectivo de sus cerca de 5.000 integrantes si la multinacional lleva a cabo su proyecto.
Una comunidad de u'was saltó de un precipicio a fines del siglo XVII para evitar la colonización española.
El conflicto con la Oxy data de 1992, cuando la estatal Empresa Colombiana de Petróleos (Ecopetrol) firmó un contrato con la multinacional para exploraciones en el llamado bloque Samoré, en una selvática región oriental fronteriza con Venezuela.
Los indígenas se opusieron por considerar que se estaban violando sus derechos al no haber sido consultados según lo establecía la Constitución promulgada en 1991.
En la polémica intervino la Corte Constitucional (que tutela el cumplimiento de la carta fundamental), que pidió en 1995 la anulación de la licencia de exploración otorgada a Oxy por no haberse realizado el proceso de consulta con los u'wa. Los trabajos de exploración sísmica se suspendieron.
En 1997 y 1998 se produjeron varias reuniones entre las partes, pero los u'wa mantuvieron su posición de rechazar la explotación petrolera en el bloque Samoré, hasta septiembre pasado, cuando el gobierno reglamentó la reserva de la comunidad y aumentó su extensión de 61.0000 hectáreas a 221.000.
La decisión precedió al otorgamiento de una licencia definitiva a la Oxy para explotar petróleo en el bloque Samoré, a escasos cinco kilómetros de la reseva u'wa.
El argumento esgrimido es que el proyecto se encuentra fuera de la reserva indígena, planteo que el congresista independiente Gustavo Petro consideró una burla hacia los nativos.
Petro sostuvo que el problema no es si se está dentro o fuera de la reserva sino "de la defensa de la cultura indígena", por lo que Colombia podría ser demandada por el delito de genocidio.
Los u'wa recibieron en julio de 1998 el premio Bartolomé de las Casas, un reconociento del gobierno español a las personas o instituciones destacadas en el respeto y defensa de los valores indígenas.
Así mismo, su lucha frente a Oxy es respaldada por activistas internacionales organizados en el Grupo de Trabajo de Defensa de los U'wa, que sostienen que la explotación en la proximidad de la reserva indígena dañará la selva tropical y pondrá en peligro la seguridad de una comunidad ya asediada por guerrilleros.
A comienzos del año pasado, tres activistas estadounidenses que trabajaban en un proyecto de defensa de la cultura u'wa fueron asesinados por un grupo de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), la organización guerrillera más poderosa de Colombia.
El ministro de Minas, Carlos Caballero, dijo este miércoles que la Oxy ya "ha comenzado a perforar para conocer la cantidad de petróleo que se encuentra en ese bloque Samoré", un proyecto "muy importante" para la economía del país.
Según el funcionario, el proyecto de Samoré significa para Ecopetrol "un aumento de reservas petroleras bastante importante", que evitará que Colombia pase en 2005 a ser importador de crudo.
Los informes de Ecopetrol indican que las reservas del bloque Samoré son de cerca de 1.300 millones de barriles, que se sumarían a los cerca de 3.000 millones que tiene actualmente Colombia. (FIN/IPS/yf/mj/en pr/00