/BOLETIN-DD HH/ COLOMBIA: Activistas internacionales se suman a protesta indígena

Organizaciones ambientalistas y sociales de América Latina y Europa se suman al pedido a Colombia del retiro de la licencia concedida a la empresa Occidental Petroleum (OXY) para prospección petrolera en territorio indígena.

La campaña, que comenzará la semana próxima con protestas que se repetirán cada jueves ante las embajadas colombianas en Ecuador, Francia, Gran Bretaña y Holanda, es en apoyo a la resistencia de los u'wa a la exploración en busca de petróleo en su territorio ancestral, ubicados en el nordeste del país.

Unos 200 indígenas ocupan desde el 14 de noviembre el campo Gibraltar, del llamado bloque Samoré, en el que la compañía trasnacional de origen estadounidense proyecta iniciar los trabajos autorizados por el gobierno de Andrés Pastrana.

Los dirigentes u'wa anunciaron que se retirarán de la zona solo cuando Bogotá revoque la licencia otorgada a la compañía OXY.

Otro grupo de 100 indígenas, de los casi 5.000 que integran la comunidad, se movilizaron la semana pasada en la capital colombiana pidiendo "evitar el genocidio" a que los conducirían si no se da marcha atrás a la decisión.

"Estamos dispuestos a que el gobierno nos bombardee, pero no abandonaremos estas tierras ancestrales" para evitar que "la (empresa) OXY saque el petróleo que es la sangre de nuestra madre tierra", aseguró Roberto Afanador, uno de los líderes de la protesta.

Ruben Morales, investigador de la Universidad Insdustrial de Santander y activista de la campaña "Colombia es u'wa", dijo a IPS que la declaratoria de "resistencia" le da al conflicto "un giro muy delicado", porque confirma que la comunidad no va a permitir que se vulneren sus derechos.

"Los u'wa no tienen fusiles", pero si son violentados cuentan con el respaldo de muchas organizaciones ambientalistas y sociales nacionales e internacionales "que han asumido la campaña como suya", afirmó.

Morales, autor del libro "Gritos de dolor del indígena americano", agregó que los u'was solo plantean la conservación de un proyecto de vida que hace parte de su cosmogonía, por cuya defensa incluso están dispuestos a morir.

"Ellos entienden que hay un mundo arriba y otro abajo y que ellos son el mundo del medio que canta, cuida y labora la tierra para que no se destruya", y el día que se instale un tubo de petróleo "se destruye ese mundo, porque el ruido rompe el silencio, daña los espíritus y espanta el amor", explicó.

El experto señaló que con las explotaciones petroleras viene una forma de vida distinta, que acaba con las tradiciones de las comunidades, con su habitat y su espíritu.

La campaña "Colombia es u'wa" divulgó el jueves pasado en Bogotá una declaración de líderes de la comunidad indígena en la que anuncian su propósito de fortalecer "todas las acciones que permitan el retiro definitivo de la compaía OXY del bloque Samoré".

También informan de su negativa a participar en la llamada "Alianza Ambiental por Colombia", un mecanismo de consulta creado por el gobierno para proyectos del que participan organizaciones sociales.

Los u'wa sostienen que la Alianza es utilizada por Bogotá "para conseguir recursos nacionales e internacionales a nombre de las urgencias ambientales del país", mientras "sus acciones muestran desdén o soluciones por la vía violenta" para esos conflictos.

El ministro del Medio Ambiente, Juan Mayr, otorgó a la OXY en septiembre una licencia para explorar el pozo de Gibraltar, de Samoré, situado a escasos cinco kilómetros de la reserva de los u'wa, cuyo territorio había sido ampliado por el gobierno un mes antes atendiendo una antigua demanda de los indígenas.

Con el otorgamiento de la licencia a la empresa transnacional y la ampliación de la reserva indígena en casi tres veces de la que existía, llevándola a 220.275 hectáreas, el gobierno intentó poner fin al conflicto iniciado el 27 de agosto de 1991.

En esa fecha, la estatal Empresa Colombiana de Petróleos (Ecopetrol) firmó un contrato de asociación con OXY para explorar hidrocarburos en el bloque Samoré, y en 1995 el ministerio de Medio Ambiente otorgó la licencia correspondiente para la exploración.

Los u'wa apelaron la decisión con el argumento de que el convenio violaba la Constitución Nacional, en el artículo que señala que las comunidades deben ser consultadas sobre los proyectos de explotación de recursos natulares en sus territorios.

La razón de fondo de la comunidad para no permitir la explotación de petróleo es que, según sus creencias, el territorio u'wa es el corazón del mundo y "por donde corren las venas que alimentan el universo, y si se destruye se desangra el mundo".

La Corte Constitucional ordenó a la empresa OXY en 1997 suspender las actividades, en las que ya se habían invertido cerca de 12 millones de dólares. Ante ello, la empesa anunció que solo continuaría el proyecto si los indígenas lo aprobaban.

Pero en septiembre se reanudó la polémica tras aprobar el gobierno la licencia para las prospecciones con el argumento técnico de que la zona autorizada está fuera de la reserva de los u'wa.

Los u'wa entienden que el conflicto actual no puede reducirse solo a los límites de su reserva, ya que reclaman como suyo desde siempre todo el bloque Samoré, que se extiende por los departamentos de Boyacá y Santander, en el nordeste de Colombia. (FIN/IPS/yf/dm/hd en/99

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe