Las fuerzas armadas de Pakistán deben devolver el poder al gobierno civil, exhortó hoy el presidente de Nigeria, Olusegun Obasanjo, en el primer día de la cumbre de la Commonwealth (Comunidad Británica de Naciones) que se celebra en esta ciudad de Sudáfrica.
El pedido de Obasanjo, quien fuera gobernante de facto en su país entre 1976 y 1979 y ahora fue elegido en elecciones democráticas, tiene la ventaja que da la "perspectiva del tiempo transcurrido de que los gobiernos militares son indeseables", aseguró.
Pakistán fue suspendido de la Commonwealth menos de una semana después de que el primer ministro Anwaz Sharif, elegido democráticamente, fuera derrocado por las Fuerzas Armadas el 12 de octubre, en un golpe de Estado dirigido por el general Pervez Musharraf.
Aunque el golpe tuvo apoyo popular, Obasanjo dijo que "aun el mejor de los gobiernos militares" no podría salvar a un país del mal gobierno.
"Los efectos adversos y debilitantes que tuvieron las dictaduras militares para el desarrollo de Africa son demasiado evidentes", agregó Obasanjo.
Nigeria fue suspendida por la Commonwealth en 1995 debido a las violaciones contra los derechos humanos y a la falta de democracia después de la ejecución de nueve activistas, entre ellos el escritor Ken Saro Wiwa.
Pero el país de Africa occidental fue aceptado nuevamente por la agrupación de 54 ex colonias británicas el 29 de mayo, el día en que Obasanjo asumió la presidencia.
"Volvemos para hacer nuestro aporte y beneficiarnos de la sabiduría y los privilegios colectivos que brinda la Commonwealth. Hemos tragado la amarga píldora de que nos dijeran la verdad y nos pusieran en línea", dijo.
La vuelta de Nigeria a la Commonwealth fue posible después de la muerte del dictador Sani Abacha, en junio de 1998, y la posterior asunción al poder del general Abdulsalami Abubakar, cuyo programa de transición condujo al fin del gobierno de facto y a la elección de Obasanjo.
Aunque varios sectores de Pakistán apoyaron el golpe de Estado, Obasanjo dijo que este se debe condenar. "Es una cuestión de principios y no de si los militares son buenos o no. No es aceptable", afirmó.
El jefe Emeka Anyaoku, secretario general de la Commonwealth, dio la bienvenida a Obasanjo y manifestó su esperanza de que no se repitan situaciones como la de Pakistán.
"Existe un claro propósito democrático en todos los países de la Commonwealth, y corresponde a esta y futuras cumbres fortalecer ese propósito y asegurar que nunca se debilite", dijo Anyaoku.
"La Commonwealth se encontraba en la incómoda posición de abogar por la democracia y los principios democráticos, pero demasiado a menudo se vio obligada a convivir con regímenes que eran expresamente antidemocráticos", agregó.
"En un sentido muy real, la Commonwealth es ahora un club de democracias", sostuvo Anyaoku.
Para demostrar que Nigeria aprendió la "lección", Obasanjo dijo que todo los presos políticos en su país fueron liberados. "Autoricé la liberación de todos los detenidos que pasaron dos o más años a la espera de un juicio, con excepción de los casos de asesinato y otros crímenes graves como robo armado", explicó.
"Apelo a los militares de Pakistán y de Africa en especial para que hagan lo que es correcto y honorable. Los gobiernos militares no dan prioridad a la participación popular como centro del desarrollo, y no pueden hacerlo. Yo lo sé por experiencia", destacó Obasanjo. (FIN/IPS/tra-en/lm/mn/aq/ip/99