VENEZUELA: Constituyente comienza a practicar la coexistencia

Los políticos de Venezuela comenzaron a practicar nuevas disciplinas de coexistencia y autorregulación, que son la clave del acuerdo logrado esta semana para aplacar el clima de tensiones mientras sesiona la Asamblea Constituyente.

Una comisión de constituyentes y parlamentarios, que protagonizaron enfrentamientos políticos desde mediados de agosto, tiene pautado afinar a partir de este martes los detalles de un acuerdo logrado con mediación de la Iglesia Católica.

El acuerdo permitiría la coexistencia entre la Asamblea Constituyente, dominada por seguidores del presidente Hugo Chávez, y el Congreso de mayoría opositora.

La Asamblea aceptó abrir "un paréntesis" en la aplicación de su resolución de emergencia legislativa, que suspende las sesiones ordinarias y extraordinarias del Congreso, a cambio de un compromiso parlamentario de "autorregular" sus funciones.

"No se trata de capitular, sino que sólo hicimos un paréntesis para resolver problemas puntuales", aseguró el presidente de la Asamblea, Luis Miquilena,

El acuerdo acepta la reanudación de las sesiones ordinarias del Congreso a partir del 2 de octubre, como ocurre cada año, aunque esta vez sólo para aprobar leyes esenciales, autorregulándose para no colisionar con las decisiones de los constituyentes.

La Asamblea Constituyente fue instalada el 3 de agosto con la misión fundamental de redactar una nueva Constitución de Venezuela en un plazo máximo de seis meses.

En su primera sesión se declaró "originaria", con lo cual el poder constituyente quedaba por encima del constituido, incluso con capacidad para disolver instituciones del Estado.

Aunque esas atribuciones han sido cuestionadas por opositores y por algunos juristas, los constituyentes aprobaron una reorganización de los poderes públicos, argumentando la urgencia de emprender la tarea de transformación del país.

El primer paso fue un decreto de emergencia judicial, que ya comenzó a destituir jueces acusados de actitivades irregulares, y generó la renuncia de la presidenta de la Corte Suprema de Justicia, Cecilia Sosa.

Luego aprobaron la emergencia legislativa, influenciada por la inesperada decisión de la oposición de suspender el receso parlamentario y convocar una sesión extraordinaria, con lo cual se rompió un acuerdo previo con la Asamblea.

La suspensión de sesiones hasta que estuviera aprobada la nueva Constitución con la cual respondieron los constituyentes, provocó el desafío del Congreso y, en cierta forma, hizo reaparecer a los partidos opositores.

La oposición había quedado apabullada tras el aplastante triunfo del gubernamental Polo Patriótico en las elecciones de la Asamblea Constituyente del 25 de julio.

Los partidos socialdemócrata, Acción Democrática, y democristiano, Copei, que habían alternado el poder durante 40 años de democracia cayeron en una crisis que generó la renuncia de sus direcciones y los relegó a una desarticulada oposición.

Sin embargo, la emergencia constituyente les dio pie para volver a la escena política a través de protestas para defender los derechos del Congreso, que incluso generaron algunos disturbios en torno a la sede legislativa en Caracas, donde también sesiona la Asamblea Constituyente.

Una manifestación que reunió a miles de personas en el centro de Caracas el jueves contribuyó a demostrar que la oposición al gobierno de Chávez recupera su poder de organización y protesta.

Analistas locales han destacado que la Asamblea también reconoció el resurgimiento de la oposición, al aceptar una negociación para suavizar el clima de tensión y sus repercusiones nacionales e internacionales.

Pero al mismo tiempo, esperan reacciones a este acuerdo por parte de los sectores más radicales del cuerpo constituyente, que ya han comenzado a cuestionar las atribuciones de su directiva para negociar con el Congreso.

La coexistencia, con todas sus fragilidades, deberá mantenerse hasta que se haya aprobado la Constitución, cuya entrada en vigencia demandará una "religitimación" mediante elección de los integrantes de poderes públicos, de acuerdo a la nueva normativa.

Las autoridades de la Asamblea Constituyente estiman que la nueva Constitución podría ser sometida a la aprobación popular en un referendo a realizarse antes de fin de año.

Chávez, quien asumió el poder en febrero enarbolando la convocatoria a la Asamblea Constituyente como su principal proyecto político, aseguró que cuando entre en vigor la nueva Constitución se materializará el "cambio profundo". (Fin/IPS/lc/dm/ip la/99

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe