Las intensas lluvias que afectan América Central hace 15 días han causado alrededor de 40 muertes y puesto en alerta máxima a las autoridades, mientras se prevén tormentas tropicales y posibles huracanes.
Los servicios meteorológicos de la región alertaron a los organismos de socorro sobre la formación de 14 tormentas tropicales, de las cuales al menos cuatro tendrían potencial para convertirse en huracanes, cuando la población aún no logra reponerse del drama causado por el Mitch hace apenas 11 meses.
Los gobiernos centroamericanos se mantienen en permanente estado de alerta debido a las dificultades que podrían afrontar para atender emergencias mayores en caso de concretarse estos pronósticos.
En octubre de 1998, la región sufrió los embates del huracán Mitch, al que la Organización Panamericana de la Salud (OPS) consideró "el mayor desastre ocurrido en América Central en el siglo XX".
Mitch "puso en serio peligro los progresos en materia de salud pública alcanzados en esta región, además de causar importantes daños a la infraestructura productiva", según la OPS.
El elevado número de muertos, heridos y desaparecidos que causó el huracán puso de relieve la alta vulnerabilidad de las poblaciones centroamericanas a estos desastres naturales y sembró preocupaciones para el futuro inmediato, agrega el informe de la organización.
La Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres de Guatemala (CONRED) informó el martes que las lluvias han dejado 132 casas destruidas y 675 dañadas, 4.100 afectados, 1.300 damnificados y 573 evacuados.
Los departamentos más afectados por las lluvias son el norteño Alta Verapaz, donde se hubo derrumbes en carreteras, y los meridionales Retalhuleu y Escuintla, con desbordes de ríos y graves inundaciones, lo mismo que ocurre en los orientales de Zacapa e Izabal.
Ismael Ruano, de la municipalidad de Morales, departamento de Izabal, reveló que los pobladores que tienen sus viviendas en zonas de riesgo son trasladados a áreas más elevadas de la localidad por el comité de emergencia regional.
"El río Motagua es el que más problemas ocasiona, principalmente en las fincas bananeras donde las pérdidas son millonarias", dijo Ruano.
La empresa Bananera de Guatemala (Bandegua), subsidiaria de la trasnacional estadounidense Chiquita Brands, notificó el despido de 900 trabajadores a causa del cierre de tres fincas en Morales.
Las intensas lluvias que afectaron algunas fincas, así como el descenso en la demanda internacional, obligaron a Bandegua a cerrar operaciones en el ramal Río Bobos, compuesto por tres fincas, confirmó el secretario general del Sindicato de Trabajadores Bananeros, Mario Martínez.
El Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social informó que se mantiene la alerta roja en 14 de los 22 departamentos del país, por temor a que se desaten epidemias de diversa índole como consecuencia de las lluvias.
Mientras, brindan información sobre como evitar las diarreas, infecciones respiratorias y enfermedades de la piel.
Por su parte, Marleny Moscoso, vocera de Conred, dijo a IPS que la mayoría de los ríos del país se encuentran en el límite de su cauce por lo que se esperan más inundaciones si las lluvias continúan con la misma intensidad.
"Hemos tenido que hacer un llamado a las autoridades locales, cuerpos de socorro, ejército, policía y hospitales para que estén en alerta" reiteró Moscoso.
Mientras, en Nicaragua, unas 100.000 personas en el noroeste del país han quedado aisladas por la destrucción de puentes y caminos como consecuencia de las torrenciales lluvias.
En Honduras, el país más afectado por el huracán Mitch el año pasado y de cuyos daños aún no lograba reponerse, las lluvias de los últimos días ya dejaron un saldo de 13 personas muertas, dos desaparecidas, alrededor de 7.000 evacuados y centenares de viviendas destruidas y dañadas.
"La situación es grave, porque el nivel de los ríos y de tres represas han aumentado en forma peligrosa", dijo el asesor presidencial Nahum Valladares.
En Costa Rica, las autoridades ya han decretado "alerta roja" por las lluvias que hace dos semanas afectan al país, donde se han registrado seis muertes y más de 700 evacuaciones.
Mientras, en El Salvador se han registrado seis muertos a causa de las lluvias, y unas 3.000 personas debieron ser evacuadas.
Los desastres naturales comunes en América Central tienen sus peores efectos en la población más pobre, que carecen de acceso a viviendas bien construidas en zonas seguras, a servicios básicos de salud, a educación e información.
El informe titulado "Guatemala: el rostro rural del desarrollo humano", auspiciado por el Sistema de Naciones Unidas en Guatemala, sostiene que "aunada a la pobreza y a la ocupación desordenada del territorio, la degradación ambiental tiende a incrementar los riesgos derivados de un evento natural".
Según el informe, estos tres factores hacen que la sociedad, como se ha visto con el Mitch, sea más vulnerable y que un fenómeno natural que en otras condiciones podría tener consecuencias menos graves, adquiera así el carácter de un desastre de grandes dimensiones. (FIN/IPS/cz/mj/dv en/99