Un grupo defensor de los derechos humanos confirmó la aparición de más de 100 cadáveres en las costas de Benín y Togo, lo cual refuerza las sospechas formuladas por Amnistía Internacional acerca de la participación del gobierno de Togo en los presuntos asesinatos.
Cientos de personas fueron ejecutadas por la policía secreta durante la campaña electoral de Togo, en junio de 1998, según el informe "Togo: Estado de Terror" que el grupo de derechos humanos con sede en Londres difundió en mayo.
"Aparecieron cadáveres en las playas de Benín y Togo, y se vieron otros flotando en la costa atlántica de Benín durante al menos cuatro días", afirmaban los autores del informe.
Ahora, la Liga para la Defensa de los Derechos Humanos de Benín confirmó la presencia de los cadáveres en la costa de este país africano luego de seis semanas de investigación, dando así validez a la acusación de Amnistía Internacional contra el vecino gobierno de Togo.
Pescadores dijeron haber visto "unos 60 cadáveres a merced de las olas. Los cuerpos parecían un grupo de ovejas flotando. Sólo llevaban ropa interior", según la Liga.
"La comunidad de la zona organizó varias ceremonias funerarias, como lo exigen las tradiciones locales, antes de enterrar los cuerpos devueltos por el agua", relató el presidente de la Liga, Julien Togbadja, que tiene fotografías de los entierros.
"Vimos las tumbas donde los enterraron, tenemos varios relatos que lo corroboran y también hicimos varios descubrimientos. Había tanta gente que confirmaron cosas durante nuestra investigación que no tuvimos problema para confirmar las sospechas de Amnistía Internacional", dijo Togbadja.
La Liga buscó información en todos los pueblos de la costa atlántica de Benín donde el mar podía haber arrojado cadáveres o donde podrían haberse visto flotando en las cercanías, señalan los autores del informe.
La investigación no fue fácil, ya que la gente de la zona tenía miedo a las represalias y al acoso por parte de las autoridades de Benín o de Togo, así que no se mostraban dispuestos a cooperar de inmediato, comentó Togbadja.
Los cadáveres encontrados están vinculados a hechos de 1993, un año de crisis política en Togo que provocó una ola de refugiados hacia Benín, y con lo ocurrido en junio de 1998, cuando se celebraron las elecciones presidenciales, sostiene la Liga.
El gobierno de Togo desmintió el informe de Amnistía Internacional e inició un juicio contra el secretario general de la organización, Pierre Sane.
El ministro de Defensa de Benín, Pierre Osho, también rechazó el informe, y aseguró que los oficiales del ejército de su país no sabían que el mar hubiera arrojado cadáveres a sus playas.
La estatal Comisión de Derechos Humanos de Benín sólo mencionó, en un informe del día 6, la aparición de personas ahogadas a causa de accidentes. Sin embargo, la Liga sostiene que algunos cadáveres se descubrieron y enterraron en presencia de las autoridades locales.
Tobadja aseguró que funcionarios de Benín fueron invitados a Togo, donde los recibió el jefe de Estado Gnassignabe Eyadema. En ese encuentro, habrían recibido sobornos que los llevaron a negar por televisión que los cadáveres hubieran llegado a sus costas, sostuvo.
La Liga pidió formar parte de la comisión internacional de investigación que, entre otras cosas, abrirá las tumbas para ver si los objetos enterrados coinciden con las pertenencias de los cadáveres que llevó el mar a la costa.
Además, la comisión "investigará los archivos de la policía secreta de Benín y de Togo. Analizará en particular la cantidad de oficiales del ejército de Togo que se encontraban en Lomé antes y después de las elecciones presidenciales de 1998", explicó Tobadja. (FIN/IPS/tra-en/mb/ait/nrn/sz/mn/ceb/aq/ip-hd/99