Organizaciones de derechos humanos objetan la decisión de Indonesia de nombrar al jefe de un grupo paramilitar proindonesio para dirigir la unidad de defensa civil de Dili, la capital de Timor Oriental.
La Federación Internacional para Timor Oriental (FITO) escribió este martes al secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Kofi Annan, para hacerle saber que Eurico Guterres, el líder de la milicia Aitarak, no es el adecuado para mantener la seguridad en el territorio ocupado por Indonesia.
"Es inconcebible que se dé un puesto para mantener la seguridad a estos asesinos reconocidos", declaró la FITO, en referencia a los paramilitares de Guterres.
El nombramiento de Guterres fue elogiado por el jefe de policía indonesio en Timor Oriental, el coronel Timbul Silaen, pero preocupa a funcionarios de la ONU que preparan el referéndum del 8 de agosto que decidirá la autodeterminación o la autonomía del territorio dentro de Indonesia.
Funcionarios del foro mundial pretenden que la Misión de la ONU en Timor Oriental brinde estabilidad al territorio para que los aproximadamente 800.000 habitantes puedan votar.
El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó el viernes el envío de 270 asesores policiales a Timor Oriental en las próximas semanas. Funcionarios internacionales dijeron a IPS que todos los policías deberían llegar al territorio este mes.
Pero la ONU depende de Indonesia, que invadió a Timor Oriental en 1975 y luego lo anexó en 1976, para garantizar la seguridad del referéndum. El nombramiento de Guterres agregó inquietud a la situación.
Un funcionario de la ONU dijo que Indonesia puede nombrar líderes paramilitares para dirigir unidades de defensa civil, pero que esas medidas no serán aceptadas por la comunidad internacional.
Annan advirtió el mes pasado que "las milicias, que muchos observadores creen que operan con el consentimiento del ejército (indonesio), no sólo comenzaron a atacar a los grupos independentistas, sino que comienzan a amenazar a los partidarios más moderados de la integración" con Indonesia.
"Las milicias aitarak se encuentran al frente de la campaña por la integración, que es su razón de existir. No sólo propagan sus opiniones con palabras, sino que matan a los dirigentes y activistas independentistas", escribió la FITO este martes.
Guterres reconoció su papel en el grupo paramilitar, así como su oposición a los partidarios de la independencia que, según organizaciones como la FITO, comprenden a la gran mayoría de timorenses.
En una entrevista con la radio británica British Broadcasting Corporation (BBC), el líder admitió que su grupo aitarak recibió armas del ejército indonesio.
En las últimas semanas, las milicias congregaron a 30.000 timorenses desplazados por los combates en campamentos donde se hostigan las opiniones independentistas, sostuvo Sidney Jones, director ejecutivo de la organización de derechos humanos Human Rights Watch-Asia.
Mientras el personal de la misión de la ONU llega a Timor Oriental, funcionarios del foro mundial advirtieron que las unidades de defensa civil no deben tener un papel protagónico para mantener la seguridad durante el referéndum del 8 de agosto.
Ian Martin, director de la misión de la ONU, dijo que la organización cree que "sólo la policía debe encargarse de la seguridad".
A medida que llegan los funcionarios de la ONU aumenta la sensación de seguridad de los timorenses, aseguró Martin, sobre todo en Dili. Pero "no creo que se haya creado una sensación de confianza suficiente", precisó. (FIN/IPS/tra-en/fah/mk/aq/ip/99
