Río de Janeiro se prepara para recibir a los gobernantes de 48 países que participarán en la Cumbre América Latina y el Caribe-Unión Europea (AL/C-UE).
La cita no tendrá la dimensión de la Cumbre de la Tierra de 1992, que atrajo más de cien jefes de Estado y de gobierno y más de 20.000 participantes, pero exigirá una gran movilización de recursos humanos y materiales. Su custodia estará a cargo de más de 9.000 militares y policías.
En contrapartida, el gobierno local espera incrementar el turismo en la ciudad, que va consolidando una tradición de servir como sede a multitudinarias reuniones internacionales.
La Cumbre tendrá lugar el lunes y martes de la próxima semana, en el Museo de Arte Moderno, en un gran parque de Flamengo, a orillas de la Bahia de Guanabara y cerca del centro de Río.
Los organizadores estiman que 5.000 personas pasarán cada día por el lugar, entre ellas 1.500 periodistas nacionales y extranjeros.
Cerca de 3.500 soldados del ejército, 1.500 efectivos de la Policía Militar y casi mil Policías Federales se ocuiparán directamente de la protección de las 48 delegaciones, desde el aeropuerto a los hoteles y al lugar del encuentro.
La marina, la fuerza aérea y la Guardia Municipal aportarán apoyo, como control del tránsito en los alrededores. La seguridad personal de los 48 jefes de Estado y de gobierno estará a cargo de la Policía Federal, cuerpo encargado de cuestiones nacionales, como control de fronteras, narcotráfico y delitos financieros.
La Alcaldía de Río trata de retirar del area a niños de la calle y mendigos que suelen vivir en el centro y en el parque de Flamengo. Y aunque el alcalde Luiz Paulo Conde negó la existencia de la operación, guardias municipales y organismos de asistencia social fueron movilizados para la tarea.
Para las autoridades locales es una gran oportunidad de divulgar una buena imagen turística de Río de Janeiro, por lo que se preocupan de ofrecer una ciudad limpia a los visitantes.
Encuestas recientes de la estatal Empresa Brasileña de Turismo indicaron que la suciedad es la principal queja de los turistas extranjeros en relación a las ciudades visitadas, en especial Río de Janeiro, principal puerta de entrada al país.
La seguridad, que constituía el factor más negativo en el inicio de esta década, pasó al tercer lugar, superada también por la escasez de indicaciones visibles en las calles para orientar a los turistas extranjeros.
Los gobiernos municipal y estadual promoverán paseos a puntos turísticos locales y de los alrededores, para los periodistas extranjeros que ya se encuentran en la ciudad.
"Hay que aprovechar la presencia de tantos periodistas para 'vender' la imagen de Rio", señaló María Lucía de Carvalho, coordinadora de pulicidad de la Alcaldía.
Muestras de arte, espectáculos y paseos variados serán ofrecidos a los visitantes. Se estima que la Alcaldía gastó 11 millones de dólares en la reforma del Museo de Arte Moderna, obras, instalaciones y limpieza local
Tal como ocurrió en la Cumbre de la Tierra, las organizaciones no gubernamentales (ONG) también promueven una reunión paralela, pero esta vez muy limitada.
El Foro de la Sociedad Civil para el Diálogo Europa-América Latina y el Caribe tendrá lugar los mismos días 28 y 29, en la sede del Instituto de Arquitectos de Brasil. La iniciativa es de la Alianza Social Continental, que reúne a 130 ONG de América.
En 1992, miles de ONG de todo el mundo ocuparon enteramente el Parque de Flamengo, ahora sólo parcialmente preparado para acoger la reunión oficial, incluso con un restaurante instalado específicamente para la ocasión.
No será el espectáculo variado de 1992, pero se discutirá seriamente la participación de la sociedad en los procesos de integración y globalizacin, sostienen los organizadores, como la argentina Graciela Rodríguez. (FIN/IPS/mo/ag/ip/99
