Medios de comunicación caribeños exhortaron a la Comunidad del Caribe (Caricom) que no admita a Cuba en la agrupación de 15 naciones hasta que La Habana no modifique sus relaciones represoras con la prensa.
La Segunda Conferencia Anual de los Medios del Caribe, celebrada en Puerto España durante el fin de semana, aprobó una resolución a tales efectos.
No obstante, David de Caires, editor de Guyana, insistió en incluir en la resolución un llamado al gobierno de Estados Unidos para que levante el embargo económico contra Cuba.
En los últimos meses "se destruyó el espacio precario que existía en Cuba para un pequeño grupo de periodistas independientes", asegura un documento presentado a la conferencia por el presidente de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), Oliver Clarke,
"El gobierno cubano desató una ola de represión contra los periodistas independientes", agregó.
El tema fue motivo de debate y se sugirió renovar un llamado hecho por la conferencia de medios regionales celebrada en Jamaica en 1998 para que Estados Unidos deje de interferir en las ondas radiofónicas de Cuba.
Los representantes de medios cubanos invitados a la conferencia del año pasado no asistieron por habérseles negado los documentos de viaje para abandonar la isla.
Este año se centró la atención en la Ley de Protección de la Soberanía y Economía Nacional de Cuba, aprobada en febrero. El embajador cubano ante Puerto España, Guillermo Batista, negó enfáticamente que la ley tenga algo que ver con la prensa libre.
"La ley no es contra los periodistas. Castiga a quienes cooperan con la política de agresión de Estados Unidos contra Cuba", declaró.
La ley estipula que todos los medios son propiedad del estado y establece penas de hasta 20 años de prisión por la transmisión de información que se considere que apoya la actividad subversiva estadounidense contra el país.
Clarke dijo que seis periodistas continúan en prisión desde la imposición de la ley y que otros dos se encuentran desaparecidos.
Batista dijo que este último cargo era "absurdo" y agregó que incluso las organizaciones que continúan protestando por supuestas violaciones de los derechos humanos en Cuba nunca mencionan la desaparición de persona alguna.
"No ha habido desaparecidos en Cuba por más de 40 años. Nadie que conozca la historia reciente de Cuba puede hacer tal acusación", exclamó Batista.
La ley permitirá que "periodistas, intelectuales y ciudadanos (sean) multados, despojados de sus bienes y encarcelados simplemente por declarar sus opiniones libremente", aseguró un informe de Prensa Cuba, organización dirigida por Raúl Rivero, vicepresidente de la SIP por Cuba.
La ley fue aprobada por el parlamento cubano el 16 de febrero y publicada en el Diario Oficial de ese país el 15 de marzo. No se aplica a "periodistas extranjeros con autorización legítima".
Según el documento de la conferencia, "esta ley aumenta el arsenal del gobierno contra la libre información, estableciendo condenas de hasta un año por propaganda, grafitis y falta de respeto a los funcionarios públicos".
Clarke afirmó que la ley debe provocar una fuerte respuesta de Caricom y que la agrupación debería señalar a Cuba de que ese comportamiento es inaceptable.
La Habana nunca pidió formalmente el ingreso a Caricom, pero tiene calidad de observador en comités permanentes de la organización, y una Comisión Conjunta que relaciona a Caricom y Cuba se reúne con frecuencia.
La mayoría de los países de Caricom son también miembros de la Asociación de Estados del Caribe, en la que Cuba desempeña un papel líder, y varios primeros ministros, incluso Keith Mitchell, de Granada, visitaron la isla.
Las relaciones entre Granada y Cuba fueron tirantes después de la invasión de Granada encabezada por Estados Unidos en 1983, como resultado de un golpe de Estado que derrocó al gobierno popular revolucionario de Maurice Bishop.
Durante la invasión, tropas cubanas en la pequeña isla del Caribe oriental enfrentaron sin éxito a las fuerzas invasoras de Estados Unidos y el Caribe.
Las relaciones diplomáticas entre los dos países se suspendieron, pero luego se normalizaron.
El presidente cubano Fidel Castro visitó la isla el año pasado y recibió el apoyo de Mitchell para su campaña contra el embargo estadounidense.
El secretario general de Caricom, Edwin Carrington, ha pedido con frecuencia la profundización de las relaciones entre Caricom y Cuba, y los estados miembros apoyan los llamados internacionales contra el embargo económico.
El ministro de relaciones exteriores de Trinidad y Tobago, Ralph Maraj, dijo que su país es "tan constante como siempre en su posición respecto de Cuba, apoyando las relaciones en lugar del aislamiento". (FIN/IPS/tra-en/wg/cb/at/aq/ip/99