Brasil aumentará las restricciones para la concesión de visa de trabajo a los extranjeros a causa del creciente desempleo, anunció hoy el ministro de Trabajo, Francisco Dornelles.
El control del ingreso de trabajadores extranjeros es "muy flojo", dijo Dornelles, que anunció el relevo de los dos funcionarios responsables de la política de migración del Ministerio de Trabajo, Luiz Carlos da Luz y Leon Cinelli.
Brasil concedió el último año 2.480 visas de trabajo para gerentes de empresas, 1.190 para directores, 820 para ingenieros y arquitectos, 820 para técnicos en cañerías, soldaduras y afines, 460 para marineros y 360 para economistas y contadores, informó el ministro.
Este país cuenta con un gran número de profesionales para esas actividades y enfrenta un grave problema de desempleo, argumentó. "No podemos permitir que empresas extranjeras que adquirieron compañías estatales traigan tantos profesionales", añadió.
La central Fuerza Sindical (FS), preocupada ante el aumento del desempleo, especialmente en Sao Paulo,k corazón industrial de Brasil, denunció al Ministerio de Trabajo el ingreso masivo de trabajadores calificados extranjeros.
A iniciativa del FS, el gobierno impulsa el empleo temporario, por seis meses, de un millón de desocupados. Los trabajadores incorporados a ese programa son retribuidos con el salario mínimo (cerca de 76 dólares mensuales) y con alimentos, transporte gratuito y capacitación.
Esos trabajadores son destinados a servicios de limpieza y al mantenimiento y recuperación de áreas urbanas.
El gobierno municipal de Sao Paulo abrió "frentes de trabajo" según ese modelo para 10.000 personas sin empleo y con responsabilidad sobre familias numerosas. Entre los cerca de 50.000 candidatos se presentaron graduados universitarios y técnicos especializados.
Dornelles prometió discutir con los sindicatos el control de la inmigración. "Las centrales sindicales definirán la nueva política", en un diálogo que comenzará dentro de dos semanas, aseguró.
El ministro señaló que los inmigrantes deben ser aceptados sólo en sectores en que escasean los trabajadores brasileños capacitados, "como se hace en otros países". "Tenemos muchos economistas disponibles", dijo a modo de ejemplo.
Brasil ha estado tradicionalmente abierto a los inmigrantes, que tuvieron un papel importante en la construcción del país. Pero las reglas burocráticas para concesión de visas de trabajo a extranjeros son rígidas.
Telefónica de España, por ejemplo, invirtió varios miles de millones de dólares en Brasil, adquiriendo empresas públicas de telefonía. Pero varios ejecutivos de Telefónica tuvieron que dejar el país por no tener la visa, que debe ser requerido antes del ingreso en territorio brasileño. (FIN/IPS/mo/ff/lb pr/99
