El ex presidente de Zimbabwe, Canaan Banana, fue condenado hoy a 10 años de prisión por violación homosexual, pero sólo cumplirá uno, ya que el resto de la pena quedó condicionalmente en suspenso.
El otrora respetado ex jefe de Estado, mediador internacional, teólogo y escritor fue declarado culpable de 11 cargos de violación homosexual y deberá pagar 13.500 dólares de compensación a su antiguo colaborador presidencial, Jefta Dube, y a la familia de un hombre asesinado por Dube.
Los abogados de Banana presentaron de inmediato una apelación contra el fallo en la Suprema Corte, por lo que el ex gobernante sigue bajo arresto domiciliario.
El juez Godfrey Chidyausiku sentenció al ex pastor metodista a un año efectivo de cárcel, con trabajos forzados.
Nueve de los 11 cargos presentados contra Banana en diciembre fueron reunidos en uno sólo para la sentencia, por el cual se le condenó a dos años de prisión y trabajos forzados, pero un año se suspendió por un lapso de tres años a condición de que no vuelva a cometer un delito similar.
Así mismo, Banana fue sentenciado a ocho años de cárcel por los otros cargos, sodomía y acto antinatural. Tres se suspendieron por otro período de tres años a condición de que no cometa otro delito similar, y otros cuatro se suspendieron a cambio del pago de 13.500 dólares.
El juez Chidyausiku ordenó que los dos años de prisión incondicional transcurran simultáneamente, lo que significa que Banana deberá cumplir sólo un año de cárcel.
Las actividades homosexuales de Banana captaron la atención pública cuando Dube compareció ante los tribunales acusado de asesinato, en 1997. Los actos homosexuales están prohibidos en este país africano.
Dube, al que Banana conoció cuando aquel jugaba al fútbol, alegó en su defensa que los abusos sexuales del ex presidente lo habían llevado a la bebida, y que cuando un guardia, Patrick Mashiri, lo rotuló «la esposa de Banana», se encolerizó tanto que le disparó y lo mató en agosto de 1995.
Durante su presidencia, Banana advirtió a Dube que no denunciara sus abusos a las autoridades porque él era la "última corte de apelaciones", relató Dube durante el juicio por asesinato que se le entabló tras la muerte de Mashiri.
La compensación económica se dividirá en partes iguales entre Dube, que cumple una condena de 10 años de cárcel por el asesinato, y la familia de Mashiri.
El abogado de Banana, Chris Andersen, apeló este lunes en la Suprema Corte contra la acusación de culpabilidad y la sentencia.
El ex presidente permanecerá bajo arresto domiciliario, situación en la que está desde que volvió de Sudáfrica y de Botswana, a dónde había huido poco antes de ser requerido en diciembre.
Hubo una prolongada discusión sobre los términos de la fianza de Banana hasta que se procese la apelación. La fiscalía, dirigida por Augustine Chikumira, pidió medidas restrictivas para que Banana no vuelva a fugarse.
Banana salió del país sin sus documentos de viaje antes de ser condenado, así que es muy probable que huya ahora que está sentenciado a prisión, por lo que sería mejor enviarlo a la cárcel de inmediato, argumentó Chikumira, que se opuso a concederle la fianza.
La defensa opuso el argumento de que ese tratamiento no correspondía a un ex jefe de Estado. Chikumira contestó que «los sucesos muestran que el acusado no se comportó como corresponde a un ex Jefe de Estado».
«La fianza debe ser restrictiva. Quien está acusado por ofensas tan graves no debería mezclarse con gente (inocente)», agregó Chikumira.
El juez Chidyausiku ordenó este lunes, luego de un receso de 30 minutos, que Banana quede bajo arresto domiciliario mientras espera la apelación en la Suprema Corte, cuya fecha aún no ha sido fijada.
Banana fue obligado a entregar sus documentos de viaje, a depositar 6.750 dólares en efectivo en la Secretaría de la Alta Corte, y a entregar unos 11.000 dólares como seguro. (FIN/IPS/tra- en/lm/pm/ceb/aq/ip/99
