IRAQ: Segundo ataque fue "absolutamente correcto" para Clinton

Aviones de Estados Unidos y Gran Bretaña lanzaron hoy una segunda oleada de misiles cruceros contra Iraq, y el presidente estadounidense Bill Clinton declaró que el ataque aéreo fue "absolutamente correcto".

"La decisión que tomé al ordenar esta acción militar, aunque difícil, fue absolutamente correcta. Es en nuestro interés y en el interés de los pueblos del mundo", sostuvo Clinton en conferencia de prensa.

Según Clinton, el objetivo de la llamada Operación Zorro del Desierto, que comenzó la noche del miércoles con una primera oleada de misiles contra Iraq, es destruir la capacidad del presidente iraquí Saddam Hussein para utilizar armas de destrucción masiva.

Sin embargo, el gobierno iraquí denunció este jueves que uno de los bombardeos destruyó la casa de una hija de Saddam Hussein, aunque no provocó víctimas. Fuentes oficiales de Bagdad afirmaron que los ataques causaron 25 muertos y 75 heridos entre la población civil.

Los ataques fueron necesarios porque Iraq no colaboró con los inspectores de armas de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que verifican la eliminación de armas de destrucción masiva en el país árabe, aseguró Clinton.

Funcionarios de la defensa estadounidense informaron que aviones bombarderos B-52, cada uno capaz de disparar 20 misiles cruceros de largo alcance, despegaron de la isla Diego García, en el océano Indico, mientras aviones de la armada despegaron del portaaviones Enterprise, en el Golfo.

En Londres, un portavoz de la Real Fuerza Aérea dijo este jueves que también se utilizaron aviones Tornado británicos contra Iraq, los que retornaron sin bajas a su base en Kuwait.

La televisión mostró nuevamente este jueves la acción de la artillería antiaérea iraquí en Bagdad, aparentemente dirigida contra los misiles, pero aparte de una fuerte explosión, los espectadores no vieron destrucción alguna.

Clinton negó que haya ordenado los ataques aéreos como táctica para aplazar el debate sobre el juicio político que podría decidir su destitución y que iba a comenzar este jueves en la Cámara de Representantes.

"Lo que hice fue lo correcto para el país. No creo que ninguna persona seria crea que ningún presidente haría una cosa así", declaró.

Clinton enfrenta cargos en el Congreso por cometer perjurio ante un gran jurado por su relación sexual con la ex becaria de la Casa Blanca Mónica Lewinsky, por obstruir la justicia en una demanda de acoso sexual laboral, y por abusar de sus facultades presidenciales.

"Estados Unidos debe dirigir. No hay alternativa", dijo el presidente saliente de la Cámara de Representantes, Newt Gingrich, del opositor Partido Republicano, en una discusión legislativa sobre una resolución de apoyo al ataque aéreo.

"No hay otro país que pueda organizarse contra un dictador iraquí que quiere conseguir armas de destrucción masiva. Déjenme decirle a Saddam Hussein y a cualquier otro dictador que lo dude: Estados Unidos se puede gobernar a sí mismo y al mundo simultáneamente", exclamó.

"Sin importar los argumentos temporales, sin importar los problemas temporales, nadie en ningún lugar de este planeta debe dudar de la voluntad del pueblo estadounidense en apoyo de la libertad", agregó Gingrich.

Otros republicanos insisten que el momento en que Clinton decidió el ataque es cuestionable. "Hay demasiadas interrogantes que se deben aclarar" al respecto, dijo el dirigente Tom DeLay.

El líder de la minoritaria bancada demócrata en la Cámara de Representantes, Richard Gephardt, dijo que era "equivocado, equivocado, equivocado" debatir la remoción de Clinton mientras soldados estadounidenses están embarcados en una guerra, pues el presidente es el comandante en jefe de las fuerzas armadas.

"Cualquier sugerencia de que los bombardeos aéreos han sido afectados por el juicio político de un modo u otro son absolutamente falsos", dijo Gephardt.

Mientras, embajadores estadounidenses en todo el mundo están ocupados explicando a los países en los que están acreditados las razones del ataque, reveló la secretaria de Estado (canciller) Madeleine Albright este jueves.

Albright dijo en una conferencia de prensa que ella se comunicó en persona con más de 20 jefes de Estado y de gobierno extranjeros y con el secretario general de la ONU, Kofi Annan, para discutir la situación y que "la respuesta ha sido gratificante".

La secretaria de Estado manifestó el beneplácito de Washington por las "fuertes expresiones de respaldo de Canadá, la Unión Europea, Japón, Corea (del Sur), Australia y Nueva Zelanda".

Albright admitió que Francia lamentó el hecho de que no se haya alcanzado una solución pacífica. "Los rusos y los chinos son críticos, por supuesto, pero en el último año no propusieron ninguna alternativa viable", agregó.

La funcionaria dijo que la oposición de tres miembros permanentes del Consejo de Seguridad no afectará el resultado de la Operación Zorro del Desierto. Rusia manifestó su preocupación pero "no tiene soluciones mejores", dijo.

Albright lamentó el ataque de Moscú a Richard Butler, presidente de la Comisión Especial de la ONU (UNSCOM) que controla el cumplimiento de la eliminación de arsenales de destrucción masiva por parte de Iraq.

"El problema es Saddam Hussein. No hay otro problema más allá del no cumplimiento" de las condiciones impuestas por la ONU a Iraq "por parte de Saddam Hussein", manifestó la secretaria de Estado.

Los comentarios de Albright sobre la posición de Rusia se produjeron después de que el presidente Boris Yeltsin declaró que los ataques contra Iraq "violaron crudamente" la Carta de la ONU.

Por su parte, la Cámara Baja del parlamento ruso (Duma) acusó a Estados Unidos y Gran Bretaña de "terrorismo internacional".

China urgió a través de un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores a Estados Unidos a "detener de inmediato su acción militar contra Iraq". (FIN/IPS/tra-en/mk/aq-mj/ip/98

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