La familia del ex presidente de México Carlos Salinas cerró filas en torno a su hermano Raúl, preso hace tres años luego que autoridades suizas le confiscaran 114 millones de dólares por considerar que provenían del narcotráfico.
Los abogados y familiares de Raúl Salinas aseguraron el martes pasado en rueda de prensa que todos los argumentos de la Procuraduría Suiza son falsos, inventaron cifras, tuvieron en cuenta declaraciones de testigos sobornados, tergiversaron datos y hubo interés en desprestigiar a México.
Miembros de la familia Salinas se reunieron en los últimos días en Cuba con el ex presidente mexicano (1988-94) para planificar la respuesta de los abogados a las acusaciones que llueven sobre Raúl Salinas, que atribuyen a una campaña política orquestada en su contra, por grupos que no identifican.
Luego de casi tres años de investigaciones, la Procuraduría de Suiza informó que confiscó las cuentas de Raúl Salinas abiertas en ese país bajo nombres reales y falsos.
Existen pruebas de que Raúl Salinas cometió mútiples delitos, según autoridades de Suiza y México. Al lavado de dinero se añade la autoría intelectual del asesinato de un dirigente político del gobernante Partido Revolucionario Institucional, tráfico de influencias, uso de nombres falsos y evasión fiscal.
"Las comprobaciones inevitablemente sugieren (que Raúl Salinas realizó) actividades de lavado de dinero y (que su dinero) constituye parte de ingresos criminales de pagos por protección", dijo la Procuraduría de Suiza.
Las autoridades detectaron que Raúl Salinas, quien durante la presidencia de su hermano amasó una fortuna de más de 250 millones de dólares y adquirió más de 40 inmuebles, cobraba por facilitar el ingreso a México de cocaína proveniente de Colombia.
Con un salario de alrededor de 190.000 dólares anuales que recibía en una dependenecia pública, el argumento de Raúl Salinas para explicar su fortuna cae a tierra, según las autoridades.
Pero la familia Salinas y sus abogados sostienen que todo es falso e impugarán los informes de las autoridades de Suiza y México. Raúl Salinas tenía esa cantidad de dinero, pues varios empresarios mexicanos le confiaron su capital para crear un fondo de inversión, declararon.
Suiza actuó de mala fe al hacer sus cálculos mediantes "operaciones contables que son ejemplo de una ineptitud increible", mientras en México se inventan pruebas y se paga a testigos, expresaron los abogados.
El único error que admite haber cometido el llamado "hermano incómodo" es usar nombres falsos con el objeto de que Carlos Salinas no reparara en sus planes.
"Las transacciones comerciales que Raúl Salinas afirma son legales, para todo propósito práctico son irregulares, incomprensibles y contrarias a las prácticas comerciales normales", indica en cambio el informe de la Procuraduría Suiza.
La autoridad suiza señaló que se limitará a congelar las cuentas de Raúl Salinas, a quien interrogó en cuatro ocasiones los dos últimos años, y que no iniciará un juicio penal en su contra, pues éste ya se realiza en México, donde la Procuraduría pide 50 años de cárcel para el acusado.
Pese a que la prensa mexicana se afirmó en los últimos días que Suiza podría señalar también a Carlos Salinas como parte de la red de corrupción que armó su hermano Raúl, el ex presidente no fue mencionado.
Los hermanos Salinas, quienes según su padre se prepararon especialmente para llegar a la Presidencia, estarían involucrados desde niños en hechos delictivos. Versiones no confirmadas indican que mataron de un tiro a una empleada que trabajaba en su casa y su padre oculto el hecho con sobornos.
También se afirma que usaron su poder para realizar negocios ventajosos y que su padre habría mantenido relaciones con varios carteles del narcotráfico. (FIN/IPS/dc/ag/ip/98