Los habitantes de este territorio insular de Puerto Rico denunciaron a la marina de Estados Unidos por causar graves daños a la salud y utilizar esta zona como blanco para sus prácticas de tiro.
Se dice que la parte este de la isla de Vieques "tiene más cráteres que la luna" como resultado de las pruebas de armamentos. Los habitantes del lugar aseguran que la contaminación generada por los militares les causa graves problemas de salud que antes no existían.
Un estudio difundido por el Departamento de Salud de Puerto Rico señaló que la presencia del cáncer en esta isla comenzó a aumentar desde los años 70, y estudios realizados entre 1990 y 1994 demostraron que la tasa de penetración de esta enfermedad es 26 por ciento superior al resto del territorio.
El médico Rafael Rivera-Castaño, quien reside en Vieques, afirmó que la presencia del cáncer es 52 por ciento superior al resto de Puerto Rico. Sus investigaciones también revelan la aparición de asma, lupus y otras enfermedades.
"En Vieques no existen las industrias contaminantes, así que la única causa a la cual se pueden atribuir estos problemas de salud es a los bombardeos de la marina de Estados Unidos", añadió el médico.
Los estudios realizados en Vieques por la misma marina de Estados Unidos revelaron la presencia de químicos como tetrilo, óxido nitroso y otros cancerígenos.
La vida en esta isla del Caribe cambió en 1941, cuando la marina se apoderó de las dos terceras partes de su territorio, que alberga una población de 8.000 personas, con la finalidad de utilizarla como campo de práctica de tiro al blanco.
Los residentes de Vieques afirman que durante todos estos años fueron sometidos a fuego aéreo y naval, lo cual suma a los químicos el ruido de artillería pesada, misiles y aviones volando a baja altura.
"Vieques es el mejor ejemplo de destrucción e injusticia ambiental en el continente americano. La marina de Estados Unidos destruyó arrecifes de coral, lagunas, manglares, palmeras, playas, especies en peligro, peces y otros organismos marinos", afirma un documento firmado por los oponentes a la presencia de la marina.
Algunos ambientalistas dicen que la situación podría empeorar si se concretara el emplazamiento de un sistema de radar antidrogas, pues estaría a menos de 500 metros de las casas, que serían bombardeadas por el campo electromagnético, con efectos adicionales sobre la salud.
La isla Vieques está ubicada entre Puerto Rico, territorio insular anexado por Estados Unidos en 1898, y las Islas Vírgenes, que también fueron convertidas en territorio de ese país en 1917.
En los últimos años hubo protestas pacíficas contra la presencia de la marina en Vieques, que incluyeron la difusión de estudios y comunicados. Incluso algunos activistas viajaron a Washington para presentar su reclamo ante el Departamento de Defensa y el Congreso.
Pero estas acciones no han producido ningún resultado, pues los bombardeos no cesan. Los residentes de Vieques advirtieron que la falta de respuesta desde San Juan y Washington podría desencadenar confrontaciones entre civiles y militares.
No sería la primera vez, pues a fines de los 70 los pescadores de la isla y otros oponentes a la presencia de la marina bloquearon sus barcos. Decenas de personas fueron detenidas.
"Siempre hemos estado en la mira de los servicios de inteligencia de Estados Unidos", aseguró el profesor Ismael Guadalupe, quien fuera detenido en esa oportunidad.
Aseguró que estos servicios conspiran para deshacer el movimiento de protesta y su principal institución, el Comité para el Rescate y el Desarrollo de Vieques.
En el juicio "resultó evidente que tanto yo como otros activistas habíamos sido vigilados durante meses", dijo Guadalupe. (FIN/IPS/tra-en/cr/cb/lc-ml/en-he/98
