El Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) puso a disposición del sector privado de Nicaragua entre 40 y 60 millones de dólares, tras mantener congeladas sus líneas de crédito para este país por más de dos años.
A este financiamiento para proyectos de energía, viviendas y caminos no tendrá acceso el área estatal por estar en mora con el BCIE desde 1995, manteniendo una deuda superior a los 560 millones de dólares, explicó a IPS Roger Arteaga, representante del banco en Nicaragua.
El Estado nicaragüense, que ya tiene arreglada su situación con la institución bancaria, va a tener acceso a más recursos, afirmó Arteada, quien aclaró que "va a ser a través de la banca privada y solamente para el sector privado".
"Al gobierno no vamos a poder darle más financiamiento, sin embargo se le otorgarán a empresas del sector privado que ejecuten proyectos que antes hacía el gobierno", por ejemplo en el sector energético o rehabilitación de carreteras, dijo.
Arteaga, en declaraciones exclusivas a IPS, explicó que los fondos disponibles, que están siendo canalizados por cinco de los once bancos privados no son "concesionales" si no en términos de mercado, a corto plazo y a una tasa de interés competitiva.
"Esperamos que el sector privado pueda absorber alrededor de 40 o 60 millones de dólares, a sabienda de que ya vienen proyectos privados de energía, de construcción de viviendas o de rehabilitación de carreteras", dijo.
El BCIE ha facilitado cerca de cinco millones de dólares sólo a través del Banco de Crédito Centroamericano (Bancentro) para ser colocados en el sector industrial, pesquero y agrícola.
La relación entre el BCIE y Nicaragua se interrumpió en 1995, cuando este país llegó a acumular una deuda de 562 millones de dólares y se declaró virtualmente incapacitado de pagar el servicio de la deuda, que representaba entre 60 y 80 millones de dólares anuales.
Por más de dos años se trató infructuosamente de encontrar una "salida consensuada" a la mora bajo los auspicios de organismos multilaterales, pero estos intentos fracasaron.
El gobierno del derechista Arnoldo Alemán reanudó este año las negociaciones bilaterales que concluyeron exitosamente el 23 de septiembre en Hong Kong, al suscribirse el convenio entre Nicaragua y la institución financiera regional.
La histórica firma se llevó a cabo durante la Asamblea de Gobernadores del Banco Mundial y del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), cuyo presidente, Enrique Iglesias, fungió como testigo de honor.
"Me siento satisfecho con el arreglo porque, si partimos de que la mora persistía desde hace dos años, creo que éste es un enorme logro. El país necesita los recursos del BCIE y tenemos cinco bancos privados que están intermediando recursos nuestros con mucho éxito", comentó Arteaga.
"No creo que este arreglo siente un mal precedente con otros países, ya que había un consenso regional para busca una solución a la deuda de este país. Este es un caso de excepcionalidad", agregó el funcionario.
El acuerdo firmado indica que de los 562 millones de dólares que Nicaragua debía al BCIE se destinan 101 millones de dólares para la iniciativa de los Países Altamente Endeudados, más conocida por HIP, promovida por el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial.
"El BCIE va a donar esos recursos a dicha iniciativa, por tanto Nicaragua podrá accesar a ellos una vez que califique", explicó Arteaga.
Un total de 61 millones de dólares van a ser asumidos por empresas estatales que recibieron financiamiento del BCIE y otros 89 millones de dólares los pagará el gobierno con certificados de depósitos por 69 millones y 20 millones de dólares en efectivo.
Los certificados van a quedar depositados en el Banco Central de Nicaragua y podrán ser utilizados por el BCIE en un futuro, según explicó Arteaga.
Un tercer componente del arreglo contempla que 301 millones de dólares serán cancelados mediante Bonos Cupón Cero a través de recursos que el gobierno nicaragüense conseguirá con países amigos.
"Hay un concierto de personalidades y de naciones que están ayudando al país a salir de estas obligaciones", comentó el repesentante del banco regional.
Entre otros, nombró al presidente del BID, al nuevo vicepresidente del BCIE Hernaldo Pasquier y al ex ministro de Economía de Nicaragua Francisco Láinez.
A cambio de estos compromisos del país centroamericano, el BCIE se comprometió a que todos los pagos que le haga van a ser reciclados durante los doce meses subsiguientes.
"El banco no está retirando recursos del país sino que está recibiéndolos en pago y recanalizándolos al sector privado", dijo Arteaga.
Gracias a la negociación exitosa, Nicaragua está pagando 20 millones de dólares en concepto de servicio de la deuda, que se elevaba antes de estos acuerdos a 80 millones de dólares anuales. (FIN/IPS/rf/dam-dg/if/97