BOLIVIA: El Che convoca al mundo en el lugar de su muerte

Más de un millar de admiradores del guerrillero Ernesto Che Guevara llegados de varios países de América Latina, Europa ÿX×ò¹ àµÑÉÑilómetros al sudeste de La Paz y que en 1967 sirvió de cuartel general del Ejército para combatir a la guerrilla- los militares bolivianos celebrarán la victoria que lograron con ayuda de la agencia central de inteligencia de Estados Unidos CIA.

El presidente de Bolivia, el general Hugo Banzer -que gobernó en forma dictatorial entre 1971 y 1978- asistirá este miércoles a los actos de Camiri, donde estarán congregados unos 2.500 efectivos del ejército y los veteranos que combatieron al Che, para además rendir homenaje a los 54 soldados caídos en 1967.

El gobierno de Banzer, que goza de mucha simpatía entre los militares, gestionaba con prisa esta semana los trámites legales para otorgar el Cóndor de los Andes, la máxima condecoración del Estado boliviano, al Comando del Ejército, por su victoria, hace 30 años, frente al Che.

Ante los actos de Vallegrande, la actitud del gobierno de Banzer es de un respeto distante.

"Estamos en democracia y cada quien tiene derecho a tomar una postura y rendir homenaje a quien considere conveniente", dijo a IPS el vocero oficial del gobierno, Mauro Bertero.

A la pequeña Vallegrande sólo han sido enviados 70 efectivos de la policía nacional para cooperar en tareas de seguridad de los visitantes de esta semana, entre ellos algunas celebridades mundiales y conocidos artistas de la música popular latinoamericana.

Una de las personas que desde el lunes está en Vallegrande participando en el homenaje al Che es Danielle Mitterrand, presidenta de la Fundación France Libertés y viuda del presidente socialista francés Francois Mitterrand.

Entre los artistas que en Vallegrande le cantarán al Che están el argentino León Gieco, los cubanos Vicente y Santiago Feliú, y varios otros de Chile, Perú, Argentina, Bolivia y otros países.

Simultáneamente, se realiza aquí un Festival de Cine y Video con producciones referidas al Che, exposiciones de libros y música, talleres de pintura, escultura y teatro y mesas de reflexión sobre la vida y pensamiento del guerrillero argentino- cubano.

La escasa infraestructura hotelera de esta población del valle bajo de Bolivia y las casas particulares que por estos días alojan a los visitantes resultaron insuficientes, por lo que se habilitó un área de "camping" donde los más jóvenes instalaron sus carpas.

Vallegrande y sus alrededores están llenos de historia relacionada con la guerrilla de 1967: a pocos kilómetros de allí está la Quebrada del Churo, en la serranía de Ñancahuazú, donde el Che fue capturado por el ejército boliviano la tarde del 8 de octubre de aquel año.

Cerca de allí está -ahora convertida en posta sanitaria- el aula de la escuelita de La Higuera, donde atado de manos en el suelo el Che pasó las últimas horas de su vida y donde fue ejecutado el 9 de octubre.

La Fundación Che Guevara, que organizó una parte de los eventos culturales que se efectúan en Vallegrande, ha previsto el descubrimiento de una escultura de 1,50 por 1,60 metros con el busto del Che en La Higuera.

Los visitantes harán una larga caminata hasta la quebrada del Churo y La Higuera los días 8 y 9, en coincidencia con los últimos lugares en los que vivió el Che Guevara hace 30 años.

También forma parte de esa historia la lavandería del hospital de Vallegrande, donde el día 10 de octubre de 1967 fuera expuesto a la prensa el cuerpo del Che, ya muerto, con los ojos entreabiertos y con una expresión de serenidad, de donde salió la famosa fotografía que dio la vuelta al mundo en aquella época.

Y, por último, la antigua pista de aterrizaje de Vallegrande cierra ese ciclo de la historia, porque allí se encontró los restos del Che el pasado 28 de junio, en una fosa común junto a los cuerpos de otros seis guerrilleros, dando así fin a uno de los mayores secretos de los militares bolivianos.

En todos esos lugares, donde la gente vive en las mismas condiciones de miseria que hace 30 años, los habitantes -humildes campesinos, por lo general- hablan del Che como el fantasma benévolo a quien ven pasear con frecuencia y como el santo milagroso a quien le rezan y piden favores.

Aunque los huesos del Che están ahora en Cuba, aquí muchos dicen ver por las noches a "San Ernesto de La Higuera".

El propio hijo del Che, también llamado Ernesto Guevara, recorrió en la primera semana de agosto pasado con unos cineastas franceses los escenarios de la guerrilla y habló con algunas personas que conocieron y trataron personalmente con su padre, hace 30 años.

Una de esas personas es Virgilia Cabrito, una humilde enana campesina que al igual que en 1967 sigue pastando unas cuantas cabras, y a quien el Che citó en la última página de su diario fechada el 7 de octubre de 1967, un día antes de su captura.

El periodista y escritor David Acebey, que en su condición de taxista acompañó y guió casualmente al hijo del Che en su expedición por la región que recorrió su padre, cuenta que el encuentro que tuvo "Ernestico" con la enana Virgilia fue muy emotivo.

Y narra, en una crónica periodística publicada el domingo en el matutino católico Presencia de La Paz, que cuando el hijo del Che le dijo a Virgilia que ojalá pronto vuelvan a verse, ella respondió mirando la llanura "A ver, qué dirá él" (el Che), como se expresan los pobres de esta región cuando encargan sus esperanzas a su santo milagroso. (FIN/IPS/jcr/dg/ip-pr/97

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe