Bangladesh obtendrá importantes ingresos de la concesión de yacimientos de gas natural a más de 10 empresas trasnacionales para su explotación, pero a un enorme costo ambiental, advirtieron ecologistas.
Las operaciones de perforación comenzaron en ocho sectores que ya habían sido concedidos. La zona destinada a la explotación incluye gran parte de las áreas de especies animales protegidas.
El gobierno espera atraer al menos 3.000 millones de dólares de inversión extranjera en los sectores del petróleo y el gas natural durante los próximos tres años.
La licitación internacional para la explotación de los yacimientos atrajo a 21 compañías petroleras de Estados Unidos, Gran Bretaña, Canadá, Francia, Dinamarca, Irlanda, Holanda, Malasia, Indonesia y Australia.
El llamado a licitación se produjo en julio de este año, y el contrato con las empresas ganadoras se firmará en diciembre. Los trabajos de explotación comenzarán en enero del próximo año en 23 sectores, en todo Bangladesh.
Los expertos advierten que la explotación destruirá la fauna y la flora naturales en varios kilómetros a la redonda de cada pozo.
Si un accidente ocurriera durante las perforaciones, sería un desastre para la población humana, animal y vegetal en un área mucho mayor, advirtió el profesor Kazi Zakir Hossain, del Departamento de Zoología de la Universidad de Dhaka.
Hossain citó el ejemplo de la explosión en junio de este año del yacimiento gasífero de Magurchara, en el distrito de Sylhet (unos 225 kilómetros al noreste de la ciudad de Dhaka), y su desastroso impacto sobre la ecología.
La explosión de Magurchara quemó plantaciones de té, otros cultivos y vegetación de las áreas circundantes, privando a cientos de familias de su medio de subsistencia, además de dañar un gran número de viviendas de trabajadores.
El incendio también abrasó un bosque circundante de 283 hectáreas, rico en fauna y flora. La tierra permanecerá inservible durante unos 50 años, predijeron científicos.
Los habitantes locales también recuerdan aún la devastación causada por la explosión de gas de Haripur, Sylhet, en 1950. Sin embargo, para el gobierno y las empresas involucradas, tales accidentes durante las operaciones de perforación son normales.
Bangladesh sufre una grave pérdida de áreas verdes y extinción de especies animales. Debido al enorme crecimiento de la población, de 118 millones, se sustituyeron bosques por áreas para cultivo y asentamientos humanos.
En 1947, 16 por ciento del territorio de Bangladesh estaba cubierto por bosques, pero la proporción se redujo a nueve por ciento, al igual que en otros países de la región.
Un zoólogo que prefirió mantener su nombre en reserva acusó al gobierno de ocultar a la población los posibles riesgos de la explotación petrolera y gasífera.
"No sabemos si se realizaron evaluaciones apropiadas del impacto ambiental ni si se sugirieron formas de mitigarlo", agregó.
"Ciertamente queremos el desarrollo económico para el bien de la población y el país, pero debería ser sustentable y no una amenaza para la supervivencia de especies animales y vegetales", expresó Hossain.
Hossain urgió al gobierno a reconsiderar su programa y a detener inmediatamente las perforaciones en los sectores que incluyen áreas de especies protegidas o amenazadas.
Al menos 18 especies animales se extinguieron en este siglo, y entre 60 y 70 especies están en peligro o en vías de extinción, destacó el profesor.
De acuerdo con la Ley de Preservación de la Fauna de Bangladesh, se establecieron unas 14 áreas protegidas desde 1971. Aunque la administración no es muy eficaz, existe cierta protección.
Por ejemplo, se cree que la población de tigres aumentó de menos de 200 en la década de 1960 a unos 400 en la actualidad. La explotación de gas y petróleo en todo Bangladesh revertirá estos progresos, advierten los ecologistas.
Pero el gobierno parece concentrarse exclusivamente en el aspecto económico. Un alto funcionario del Ministerio de Energía sostuvo que Bangladesh necesita desesperadamente gas y petróleo para su desarrollo, porque la actual reserva de 368.000 millones de metros cúbicos de gas se acabará para el año 2015.
La generación de electricidad y el proceso de industrialización, tan vital para el desarrollo del país, sufriría un gran revés si no se explotaran nuevos yacimientos gasíferos, dijo el funcionario. Bangladesh tiene una reserva potencial de gas de 1,4 billones de metros cúbicos.
"Nuestro país podría ganar un mínimo de 500 millones de dólares anuales mediante la exportación del excedente de gas", dijo el ministro de Comercio, Tofail Ahmed.
El funcionario del Ministerio de Energía prefirió guardar silencio cuando se le interrogó sobre las medidas tomadas para proteger el ecosistema en los sectores concedidos a empresas petroleras para la explotación de gas y petróleo. (FIN/IPS/tra-en/an/ml/en/97