Pesticidas tóxicos de Mauritania serán embarcados a Holanda a fin de este mes para ser icinerados en una planta de desechos peligrosos situada cerca del puerto de Rotterdam.
La acción es parte de un proyecto conjunto lanzado por la Agencia Alemana para la Cooperación Técnica (GTZ) y el grupo de empresas Royal Dutch/Shell.
El trabajo de recolección de 200 toneladas de dieldrin, un insecticida para control de la langosta, y 100 toneladas de desechos contaminados de siete sitios en Mauritania, comenzó a fines de agosto, dijo el portavoz de GTZ Hans Stehling.
El proyecto se inició en 1995, cuando el gobierno de Mauritania, país de la región del Sahel-Sahara en Africa occidental, se acercó al de Alemania solicitando respaldo técnico y financiero para el desecho de reservas de dieldrin.
El Ministerio de Cooperación Económica y Desarrollo de Alemania (BMZ) entregó unos 555.000 dólares y encargó al GTZ la ejecución del proyecto.
Stehling dijo que el proyecto se basa en un trabajo "innovador" del GTZ y Shell International Chemicals para el desecho de reservas de pesticidas en Níger, Madagascar y Mozambique.
Hasta comienzos de 1990, Shell, uno de los mayores productores de la industria del petróleo y petroquímica, fue gran productor de sustancias químicas para la protección de cultivos.
Shell es signataria del programa mundial "Cuidado Repsonsable" de la industria química, y reconoce la responsabilidad que tiene por los productos que fabricó, destacó Stehling. Uno de estos productos que ya no se fabrican es el dieldrin.
El dieldrin fue durante muchos años el producto básico para el control de langostas, y fue comprado por gobiernos y agencias de la Organización para la Agricultura y la Alimentación (FAO) de las Naciones Unidas como , para entregarlo a países como Mauritania como ayuda al desarrollo.
A fines de la década de 1980, la decisión de las autoridades regulatorias de retirar la aprobación de su uso debido a su toxicidad e icompatibilidad con el medio ambiente significó que reservas estratégicas de muchos países quedaran obsoletas de la noche a la mañana.
Con el tiempo, las condiciones del almacenamiento también se deterioraron, planteando un riesgo potencial a comunidades locales y el medio ambiente.
El problema se agrava ante el hecho de que ninguno de los países en desarrollo con reservas tienen los icineradores de altas temperaturas necesarios para una destrucción segura y respetuosa del medio ambiente del dieldrin, explicó Stehling.
El experto en desechos de GTZ Wolfgang Schimpf dijo que "como no podemos garantizar la icineración libre de contaminación de la sustancia en el sitio (Mauritania), decidimos utilizar una empresa en Europa que tiene la tecnología".
Schimpf aseguró que todas las operaciones siguen las leyes y regulaciones nacionales e internacionales.
Mauritania mejora su marco de protección legal de plantas, y recientemente se convirtió en signataria de la Convención de Basilea para el movimiento internacional de desechos tóxicos.
En Mauritania, el Servicio de Protección de Plantas del Directorio de Desarrollo de Recursos Agrícolas-Ruales (DRAP), es responsable de implementar el proyecto. DRAP brinda personal especializado, vehículos para transportar los desechos, equipos de radio e infraestructura asociada necesaria.
En Rotterdram, el operador AVE-Chemie es responsable del procesamiento seguro de desechos peligrosos. La propiedad de la compañía se divide entre el sector público y privado, y el gobierno de Holanda tiene 30 por ciento de las acciones, el gobierno municipal de la ciudad 25 por ciento y la industria química 45 por ciento. (FIN/IPS/tra-en/raj/rj/lp/en/97