Científicos de Alemania, Canadá y Estados Unidos exigieron medidas políticas inmediatas para detener el recalentamiento de la Tierra, cuyo última fase se traduciría en la desaparición bajo los mares de islas y áreas litoraleñas.
La opinión de 412 científicos encuestados por el Instituto Meteorológico de la alemana Universidad de Hamburgo circula entre los delegados de 140 naciones que desde el jueves debaten en Bonn el nuevo tratado sobre cambio climático a aprobarse a fin de año en Kyoto, Japón.
Los resultados del sondeo están contenidos en el trimestral Boletín de Cambio Climático, publicado por la secretaría de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático,, radicada en Bonn.
La encuesta recabó la opinión de 228 científicos alemanes, 149 estadounidenses y 35 canadienses.
"Preguntamos a los científicos si creen que es posible afirmar con seguridad que el recalentamiento mundial es un proceso en curso", informó Dennis Bray, del Instituto Meteorológico de Hamburgo.
Los expertos consultados podían "aceptar o discrepar" de la afirmación, según una escala en la que uno equivale al mayor grado de aceptación y siete a la máxima discrepancia.
La respuesta promedio, de 3,3, reveló que la mayoría de los científicos encuestados creen que el sobrecalentamiento de la Tierra ya está en curso, señaló Bray.
Los estadounidenses señalaron en promedio una calificación de 3,4, los alemanes 3,3, y los canadienses 2,9.
Así mismo, "preguntamos si el recalentamiento mundial se producirá con certeza en el futuro, en caso de persistir el actual comportamiento humano", añadió Bray, que realizó la encuesta.
Utilizando la misma escala, la respuesta se ubicó en promedio en 2,58 puntos, un grado de afirmación superior al caso anterior.
Bray agregó que los científicos también estuvieron de acuerdo en la necesidad de inplementar de inmediato mdidas políticas de prevención, más allá del debate acerca de si el cambio climático ya es una realidad.
Cuando se preguntó en qué grado el cambio climático tendría efectos perjudiciales para algunas sociedades, la respuesta promedio fue de 2,37. La puntuación "uno" equivalía a "alto grado".
La publicación de la encuesta coincidió con la reunión de ocho días comenzada en Bonn, correspondiente a la séptima ronda de conversaciones de las partes de la Convención Marco sobre Cambio Climático.
El debate está estimulado por los hallazgos del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC), una red internacional de expertos que tiene el auspicio del Programa de Naciones Unidas sobre Medio Ambiente y la Organización Meteorológica Mundial.
La emisión de dióxido de carbono, metano, óxido nitroso y fluorocarbonos, conocidos como gases invernadero, provocará el aumento de la temperatura mundial en un promedio de uno a 3,5 grados centígrados en los próximos 100 años, según el IPCC.
El recalentamiento elevará el nivel de los mares de 15 a 95 centímetros y el cambio afectará bosques, desiertos, praderas y otros ecosistemas, y también la salud de sociedades humanas, advirtió el IPCC.
La Convención Marco sobre Cambio Climático, aprobada en la Cumbre Mundial de la Tierra, de 1992, comprometió a los países del Norte industrial a reducir al volumen de 1990 sus emisiones de gases invernadero para el 2000. Casi 170 países ratificaron el documento.
Pero en la primera conferencia de la partes, realizada en 1995 en Berlín, la comunidad internacional reconoció la necesidad de medidas aún más enérgicas para reducir el riesgo de cambio climático.
La conferencia de las partes designó el llamado Grupo ad hoc sobre el mandato de Berlín, encargado de negociar con los países industriales un nuevo compromiso de reducción de emisiones, esta vez, para después del 2000. El Grupo ad hoc también gestiona el cumplimiento de los objetivos convenidos en 1992.
La actual ronda de negociaciones cuenta con la participación de delegados de unas 140 naciones, que elaborarán el texto de un nuevo tratado sobre cambio climático antes del encuentro ministerial de diciembre en Kyoto.
El punto de partida para los 600 delegados reunidos desde el jueves en Bonn es un texto de más de 100 páginas preparado por el presidente del Grupo ad hoc, el embajador argentino Raúl Estrada Oyuela.
El documento contiene varios puntos importantes a considerar, destacó el secretario ejecutivo de la Convención Marco, Michael Zammit Cutajar.
Zammit Cutajar mencionó la propuesta de la Unión Europea a los países del Norte de reducir 15 por ciento la emisión de gases invernadero para el 2010 con respecto a 1990.
La iniciativa fue presentada en la sesión que el Grupo ad hoc realizó en marzo en Bonn y es el primer proyecto de países del Norte para fijar un límite específico a las emisiones más allá del 2000, señaló Zammit Cutajar.
Los metas de la Unión Europea se aplicarían en principio a la producción de dióxido de carbono, metano y óxido nitroso, mientras otros gases serán agregados en el futuro. También se sugirió un listón provisional de 7,5 por ciento de disminución para el 2005.
El grupo de pequeños estados insulares, que sería el más afectado por el recalentamiento de la Tierra, exigió una reducción de 20 por ciento de las emisiones de dióxido de carbono para el 2005 con respecto a 1990.
Mientras, Zammit Cutajar confía en que otros países industriales, como Estados Unidos, Canadá y Japón, presentan sus propias propuestas concretas antes del encuentro que el Grupo ad hoc mantendrá en octubre, el último antes de la reunión ministerial de Kyoto. (FIN/IPS/tra-en/raj/rj/aq-ff/en/97