La Organización de las Naciones Unidas (ONU), que publicó varios informes condenando el tabaquismo en todo el mundo, es presionada por el gobierno de Estados Unidos para que ponga en práctica lo que predica.
"Estados Unidos aprueba y respalda la propuesta del secretario general (Kofi Annan) de prohibir fumar en todos los edificios de la ONU para fines de 1997", declaró el enviado estadounidense Seth Winnick en una reciente reunión del Consejo Económico y Social.
Winnick destacó que la mejor forma de transmitir un mensaje adecuado acerca del tabaco consiste en dar el ejemplo.
Washington, agregó, se complace ante las fuertes medidas contra el tabaquismo adoptadas por varios organismos de la ONU, incluidos la Organización Mundial de la Salud, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura.
"Apoyamos la extensión de estas actividades con vistas a aumentar la conciencia pública, a nivel mundial, de los riesgos de salud que implica el consumo de tabaco", expresó Winnick.
Dado que el tabaquismo es un tema sensible entre los 185 países miembros de la ONU, la Secretaría solamente lo "desalienta" entre sus funcionarios mediante carteles colocados en todo el edificio.
No existe una prohibición directa en la sede de la ONU. En la ciudad de Nueva York está prohibido fumar en todos los espacios públicos, pero la ONU ocupa un territorio diplomático internacional y las leyes municipales no le son aplicables.
Mientras, Estados Unidos prometió su apoyo a la propuesta de Convención Marco para el Control del Tabaco que la organización mundial aceptaría este año. Entre otros objetivos, la Convención procura proteger a los jóvenes del tabaquismo y apartarlos del vicio.
UNICEF ya pidió una prohibición mundial y respalda una estrategia integral a largo plazo para combatir la adicción al tabaco, particularmente entre los niños del mundo en desarrollo.
"Dada la creciente campaña de la industria del tabaco para aumentar sus ventas mundiales, la necesidad de acción es mayor que nunca", resaltó la directora ejecutiva de UNICEF, Carol Bellamy.
Se estima que 300 millones de los niños y adolescentes de hoy morirán de enfermedades relacionadas con el tabaquismo, un tercio de ellos en países en desarrollo, destacó.
Investigadores médicos establecieron una clara relación entre el hábito de fumar en la casa y la incidencia de infecciones respiratorias agudas y asma en los niños expuestos al humo del tabaco.
Bellamy lamentó que la propaganda de cigarrillos debilite los esfuerzos de UNICEF por salvar a millones de niños de enfermedades prevenibles cada año.
Según cifras de la Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos, la industria del tabaco invirtió 4.830 millones de dólares en publicidad y promociones domésticas en 1994, frente a sólo 361 millones de dólares en 1970.
Bellamy exhortó a prohibir la venta de tabaco a menores, incrementar el impuesto a los cigarrillos e intensificar los esfuerzos para concienciar al público de las cualidades adictivas de la nicotina y los peligros del tabaquismo. (FIN/IPS/tra-en/td/ml/he-ip/97