Para los israelíes y palestinos intransigentes y los meros frustrados por el fracaso del proceso de paz, el doble atentado ocurrido hoy en un mercado de frutas de Jerusalén occidental era un hecho inevitable.
En Gaza, las explosiones fueron consideradas una respuesta a las ofensas de Israel, principalmente a los planes de construcción de un nuevo barrio judío en la parte árabe de Jerusalén y a la transferencia de la cárcel a un hospital de la colona judía que empapeló Hebrón con afiches ofensivos al Islam.
Políticamente, el doble atentado confirmó que los grupos opuestos a los acuerdos preliminares de paz suspendieron su moratoria de facto a las actividades terroristas suicidas en Israel.
La suspensión de los ataques suicidas tuvo por finalidad darle a Yasser Arafat, presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), "una oportunidad de demostrar qué resultados producen las conversaciones", declaró antes del último atentado un miembro del Movimiento de Resistencia Islámica Hamas.
Aparentemente, Hamas, que asumió la responsabilidad de las explosiones mediante folletos distribuidos fuera de las oficinas de la Cruz Roja en Ramallah, llegó a la conclusión de que Arafat ya tuvo oportunidad suficiente.
Para la tarde del miércoles se habían anunciado 15 muertos y casi 170 heridos como consecuencia del ataque con bombas, perpetrado a la hora del almuerzo.
Los folletos, que constituyen el medio habitual de Hamas para realizar anuncios públicos, demandan la liberación de su líder espiritual Ahmed Yassin, encarcelado en Israel desde 1989, y otros prisioneros del grupo.
"Este no fue un ataque de inconformistas", dijo a IPS un veterano periodista de Gaza. "Al menos 10 kilos de explosivos por cada militante suicida, dos bombas seguidas y la naturaleza del objetivo sugieren que se trataba de gente entrenada y preparada", declaró.
Linda Meunuhen, portavoz de la policía israelí, dijo a IPS que los dos terroristas, que llevaban traje y portafolio de ejecutivo, estaban a 30 metros de distancia entre sí e hicieron detonar las bombas con pocos segundos de diferencia dentro del atestado mercado. (sigue
