Sudán anunció la liberación de 80 presos políticos y exhortó a la oposición a dialogar, en una nueva actitud aparentemente relacionada con el cambio de gobierno en el vecino Zaire, rebautizado como República Democrática de Congo.
El gobierno del presidente Omar Hassan al Bashir declaró que los detenidos fueron liberados para preparar el camino a la cooperación entre el gobierno y la oposición, incluidos los políticos que viven en el exilio.
La declaración, emitida el domingo por el Consejo de Seguridad Nacional, agrega que Jartum está preparando la redacción de una Constitución permanente y desea la participación del mayor número posible de políticos en el proceso.
"Sudán ya no tiene presos políticos, porque todos han sido liberados", y tal liberación "exime al gobierno de cualquier reclamación", aseguró el ministro de Justicia y fiscal general Abdel Basit Sabdarat al canal estatal de televisión.
"La oposición debería aprovechar esa oportunidad", porque "el gobierno está dispuesto a iniciar negociaciones pacíficas", agregó Basit Sabdarat.
La medida coincidió con importantes hechos políticos en el vecino Zaire, donde el líder rebelde Laurent Kabila tomó el poder el sábado y rebautizó al país como República Democrática de Congo (RDC).
No está claro si la medida de Jartum tuvo algo que ver con la victoria rebelde, pero muy probablemente el cambio en el país vecino afectará el equilibrio de poder en el centro y el noreste de Africa.
Mientras la RDC era gobernada por el dictador Mobutu Sese Seko, el ejército sudanés a menudo pasaba por su territorio para atacar al rebelde Ejército de Liberación Popular de Sudán (SPLA) desde atrás, pero ahora ya no podrá volver a hacerlo.
Por otra parte, la caída de Mobutu constituye un alivio para Uganda, ya que algunos grupos rebeldes ugandeses utilizaban a la RDC como base de operaciones.
Ahora, Uganda podrá concentrarse en sus insurgentes, principalmente el Frente de la Ribera Occidental del Nilo y el Ejército de Resistencia del Señor, supuestamente respaldados por Jartum.
A la vez, ambos grupos rebeldes ugandeses enfrentan la oposición del SPLA, que, según el gobierno de Sudán, cuenta con el respaldo del gobierno de Uganda.
De esta forma, la nueva situación en la RDC fortalece la posición de los insurgentes sudaneses y debilita la del gobierno.
La liberación de los presos políticos no es la única señal del cambio de actitud del régimen. Un funcionario de gobierno dijo a IPS que "la democracia es una de las opciones que serían discutidas con los grupos de oposición».
Así mismo, Ali Mohamed Osman Yasin, ministro estadual de Relaciones Federales, afirmó que la democracia es ahora posible y que una de las posibilidades consideradas por el gobierno es el pluralismo político.
Actualmente, todos los partidos políticos excepto el Frente Islámico Nacional, que constituye la esencia del gobierno de Sudán, están proscriptos.
Otro hecho significativo es la inminente llegada de Sherif Abdein Handi, vicesecretario general del Partido Umma, que encabezó una coalición de gobierno hasta 1987, año en que su líder, el primer ministro Sadiq al Mahdi, fue expulsado por Al Bashir.
Umma es uno de los seis partidos que se agruparon en diciembre con el SPLA para formar la Alianza Democrática Nacional, una coalición armada que ocupó áreas del borde oriental de Sudán desde enero.
La estatal Radio Omdurman anunció que Abdein Handi llegará a Jartum esta semana desde Egipto, donde estuvo exiliado. Según medios de prensa sudaneses, Abdein Handi habría advertido que su partido no aceptará otra cosa que la democracia pluripartidaria.
Su visita es considerada por muchos observadores políticos como parte de los preparativos para un retorno a la democracia. Un diplomático occidental reveló a IPS que fue informado de contactos entre líderes opositores y el gobierno sobre el futuro del país.
Entre los presos liberados se encuentran varios líderes de partidos políticos, entre ellos el ex viceprimer ministro Said Ahmed Hussein, quien es secretario general del Partido Democrático Unido, y otro destacado miembro de ese partido, Mohamed Ismail Al Azahari, hijo del primer presidente de Sudán.
También fueron liberados dos importantes miembros del Partido Umma, Abdel Mohmound Hajj Salih, quien fue fiscal general entre 1985 y 1989, y Abdel Rahman Abdella Nugdalla, quien anteriormente había sido detenido y liberado en 14 ocasiones.
Otros liberados incluirían sindicalistas, periodistas y partidarios de los rebeldes, según el gobierno, pero hasta el momento ningún medio independiente confirmó que todos estén libres.
El canciller Ali Osman Mohmaned Taha criticó ciertos informes occidentales según los cuales sólo unos pocos miembros de los partidos proscriptos fueron liberados e instó a los autores de los informes a proporcionar los nombres de los que supuestamente permanecen prisioneros.
La liberación de los presos políticos, destacó el canciller, marca el comienzo de una nueva era política en Sudán. (FIN/IPS/tra-en/nb/kb/ml/ip-hd/97