Tras muchos años de exilio, los integrantes de la Comandancia General de la guerrillera Unidad Revolucionaria Nacional Guatemalteca (URNG) llegaron hoy a Guatemala para la firma de la paz, pero Fidel Castro, cuya visita había despertado gran expectativa, no se hará presente.
Los comandantes Pablo Monsanto, de las Fuerzas Armadas Rebeldes, Carlos González, del Partido Guatemalteco del Trabajo, Rolando Morán, del Ejército Guerrillero de los Pobres, y Jorge Rosal, de la Organización del Pueblo en Armas, llegaron procedentes de México acompañados de un grupo de invitados.
El canciller Eduardo Stein informó que los comandantes de la insurgencia no utilizarán los seudónimos para suscribir el acuerdo de paz final, este domingo, sino sus verdaderos nombres.
Así, el comandante Monsanto deberá firmar como Jorge Soto, su verdadero nombre, y Morán como Ricardo Ramírez.
González, cuyo nombre verdadero es Carlos Rosales, figura como secretario general del proscrito PGT, pero al igual que Jorge Rosal de la ORPA, no posee el grado de comandantes.
El acuerdo final será firmado por los cuatro integrantes de la comandancia general de la URNG, los miembros de la gubernamental Comisión de Paz, y como testigos de honor, el presidente Alvaro Arzú y los jefes de Estado visitantes, informó Stein.
Los jefes de Estado y de gobierno que asistirán son los de México, Venezuela, Colombia, España, Costa Rica, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Panamá y Suecia.
Otros países estarán representados por sus vicepresidentes, ministros de Relaciones Exteriores y funcionarios de alto rango.
Sin embargo, la expectativa despertada por la posible asistencia del presidente cubano Fidel Castro se diluyó tras anunciarse que la delegación de la isla caribeña estará encabezada por el canciller Roberto Robaina.
Stein informó que Robaina explicaría personalmente al gobierno guatemalteco las razones por las cuales Castro decidió no concurrir a Guatemala.
Con la noticia, la fiesta con marimba y cohetes que algunas organizaciones populares tenían preparadas para recibir al gobernante cubano se vio frustrada.
Según Stein, fue el encargado de negocios Freddy Torres, quien se encuentra en Guatemala desde hace varios días, quien informó que Castro no vendría "debido a las dificultades que tiene que resolver en el seno de la Asamblea Legislativa" cubana.
Para el matutino local "El Periódico" las razones dadas no son convincentes.
Citando a fuentes cercanas a la delegación cubana dijo que las verdaderas razones serían que "la prensa había promocionado mucho su visita y que Fidel se convertiría en la principal fuente de noticias, opacando el acto de firma de la paz".
Se asegura que el jueves por la mañana un avión de la Fuerza Aérea Cubana con 40 personas a bordo estuvo a punto de salir de la Habana con destino a Guatemala, "pero sin mayor explicación les informaron que el viaje se suspendía".
Las fuentes indicaron que los enviados del gobierno cubano ya habían elevado un informe favorable a la presencia de Castro, ya que todo lo relacionado con la seguridad y el hospedaje estaba resuelto.
Mientras, los comandantes guerrilleros iniciaron contactos con dirigentes de distintos sectores sociales para reunirse en los próximos días para tratar acerca de la incorporación de los insurgentes a la vida política del país.
la diputada indígena Rosalina Tuyuc, del izquierdista Frente Democrático Nueva Guatemala, informó que dirigentes de organizaciones mayas y sindicales solicitaron a la cúpula insurgente una reunión.
Los líderes guerrilleros también tendrían planteado entrevistarse con otros sectores políticos, sociales y económicos la semana entrante, luego de su incorporación a la vida legal.
El fiscal general Héctor Pérez Aguilera afirmó que los comandantes insurgentes no tendrán ningún problema legal para ingresar al país, amparados en la Ley de Reconciliación Nacional recientemente aprobada.
La firma de la paz firme y duradera este domingo terminará con 36 años de conflicto armado interno en Guatemala, que ha causado 150.000 muertos, un millón de desplazados internos y millares de viudas, huérfanos y refugiados. (FIN/IPS/cz/dg/ip/96
