Los industriales de Costa Rica propusieron al gobierno eliminar el impuesto al consumo, profundizar la lucha contra el contrabando y la subfacturación y aumentar las compras del sector público a la industria local, como medidas para reactivar el consumo interno y la producción.
La propuesta de tres puntos fue dada a conocer este martes por el presidente de la Cámara de Industrias, Marco Vinicio Ruiz, junto con los resultados de una encuesta de negocios que compara el comportamiento del sector industrial en el segundo trimestre del año con respecto de los primeros tres meses.
Según ese sondeo, practicado en 200 empresas, en abril, mayo y junio se produjo una contracción de las ventas que afectó sobre todo a empresas (pequeñas, medianas y grandes) de los sectores de la madera y alimentos.
El desempleo aumentó fuertemente esencialmente en el sector textil y en general en las empresas de mayor tamaño.
Para superar esta situación los industriales pretenden que el gobierno elimine el impuesto selectivo de consumo, que va de cinco a 70 por ciento, con un promedio es de 15 por ciento.
Paralelamente, proponen que el impuesto de ventas, que en marzo de 1997 deberá bajar de 15 a 13 por ciento, se mantenga en ese nivel. Si se toman las dos medidas paralelamente el fisco no dejaría de percibir ingresos, pero se abarataría el costo de vida de los sectores empobrecidos, aducen.
Un abaratamiento del costo de vida permitiría reactivar la producción en el corto plazo.
Ruiz señaló que si bien todo proceso de ajuste implica una transferencia masiva de recursos al Estado, la contracción de la demanda interna no puede ser tal que la industria sea incapaz de generar empleo.
Pero el plan de los industriales no parece tener buena acogida en el gobierno.
El vicepresidente Rodrigo Oreamuno declaró que la reactivación económica no depende del gobierno sino de la empresa privada, algo en lo cual no coinciden los industriales, al considerar que el progreso concierne a todos los sectores.
Para el ministro de Hacienda, Francisco Gutiérrez, la reactivación no se va a producir cono consecuencia de estímulos fiscales por lo cual no se bajarán los impuestos.
Ruiz acusó al gobierno de evadir su responsabilidad de dar a la economía "un empujón" y de abordar sólo programas de largo plazo.
El empresario también fustigó al gobierno porque prefiere comprar fuera del país que a industriales locales. Señaló por ejemplo el caso de la adquisición en Irsael de uniformes, botas y gorras para los policías cuando en Costa Rica existe capacidad para fabricar esos productos.
"No pedimos que dejen de importar, queremos competir en igualdad de condiciones, queremos conocer el programa de licitaciones para poder participar a tiempo", afirmó.
El sector industrial genera 200.000 empleos para una población económicamente activa cercana al millón de personas. (FIN/IPS/mso/dg/if/96)
