El presidente de Perú, Alberto Fujimori, afirmó que intentará cultivar una "amistad personal" con su colega ecuatoriano, Abdalá Bucaram, para facilitar las negociaciones sobre el diferendo limítrofe que condujo el año pasado a ambos países a una guerra no declarada.
En declaraciones formuladas a una radioemisora local, Fujimori precisó que se encontrará con Bucaram durante la próxima reunión de presidentes del Grupo de Río, que se realizará del 3 al 4 de setiembre en Cochabamba, Bolivia.
Añadió que "naturalmente, no se tratarán problemas de fondo, pero se podrá gestar un clima amistoso que facilitará las negociaciones que deberán concretar días después en Santiago los cancilleres" de ambos países.
En Santiago, además de los cancilleres de Perú y Ecuador, estarán presentes representantes de los gobiernos de Argentina, Brasil, Chile y Estados Unidos, países garantes del tratado limítrofe ecuatoriano-peruano y cuya intervención detuvo la guerra de 1995.
Al parecer, las declaraciones de Fujimori sobre su intención de buscar una relación amistosa con Bucaram, reflejan un impacto positivo del discurso del presidente ecuatoriano el 10 de agosto, cuando asumió el mando.
Fujimori no asistió a la asunción de Bucaram, excusándose en compromisos asumidos con anterioridad, y dejó pasar una oportunidad en la que pudo haber iniciado el contacto personal y amistoso que, según expresa ahora, será conveniente para las difíciles negociaciones entre ambos países.
Los analistas independientes y los observadores diplomáticos en Lima interpretaron la inasistencia de Fujimori como expresión de una cautelosa actitud del mandatario peruano y el recelo de que Bucaram dijera en su discurso algunas frases "incómodas" sobre el diferendo.
Bucaram reiteró sin embargo en dicha oportunidad sus declaraciones anteriores y afirmó que buscaría una solución pacífica al conflicto fronterizo con su vecino del sur. (FIN/IPS/al/jc/ip/96
