El trovador cubano Pablo Milanés cantará nuevamente en México luego de tres años de ausencia y a diez meses de su retiro repentino de los escenarios por serios problemas de salud.
Afectado de una enfermedad ósea que le hace guardar reposo por extensos períodos de tiempo, el autor de "Yolanda" preocupó a su público cuando, en octubre, se vió obligado a interrumpir una gira por España.
"Estuvo bastante grave", reveló en México Dagoberto Rodríguez, coordinador de una empresa de Promoción y Publicidad, pero en Cuba sólo se confirmaron los rumores este mes cuando Pablo lo reconoció en su primera presentación pública.
Al parecer, Milanés se mantuvo alejado del escenario pero no de la música y así lo demostró al reaparecer ante 10.000 personas en el Teatro Carlos Marx de La Habana, el 3 y 4 de este mes.
Fundador, junto con Silvio Rodríguez y Noel Nicola, del Movimiento de la Nueva Trova cubana, Pablo tiene en su haber un numeroso grupo de canciones antológicas y está considerado entre las mejores voces de la isla.
Procedente del "feeling", tendencia que recibió la influencia del blues estadounidense y del bolero, a finales de los años 60 optó definitivamente por una canción con un lenguaje renovado y nada facilista.
Aparecieron "Yolanda", "La vida no vale nada", "Yo me quedo" y tantas otros temas que emparentaron a la Nueva Trova con la nueva canción latinoamericana y con la canción protesta de Estados Unidos.
Fuentes cercanas al cantautor revelaron en la capital cubana, que Pablo llevará a México un concierto que, en esencia, conservará el mismo formato del que presentó en su reencuentro con el público local.
Milanes estuvo alejado de los escenarios de su país desde mediados de 1995, cuando por decreto del Ministerio de Cultura fue cerrada la Fundación Pablo Milanés.
La fundación se financiaba con los fondos del artista y se dedicaba a la producción de discos, a la edición de la revista de circulación mensual "Proposiciones" y al auspicio de otros proyectos de carácter cultural.
El cierre, ocurrido durante una de las tantas giras del artista por el extranjero, hizo pensar a más de uno en un posible exilio del trovador que es también diputado al Parlamento cubano.
Sin embargo, Milanes se apuró en dejar claro que sus contradicciones con la dirección del ministerio no tenían nada que ver con su posición política y que regresaría a la isla, aunque no volvió a cantar hasta este mes.
"La nostalgia y Pablo andan juntos", dijo el crítico Jorge Ignacio Pérez en una reseña del concierto habanero, publicada en el oficialista diario Granma el día 9.
Un total de 22 canciones, cuatro de su último disco "Plegaria" y lo más significativo de toda su obra, forman el concierto preparado para La Habana y que se presentará ahora en tres ciudades de México.
Pablo viajó a la capital azteca este miércoles y hará su primera presentación el viernes en la Plaza de Toros del distrito federal, considerado uno de los espacios con mayor capacidad en la ciudad.
Según el programa inicial, el trovador cantará el sábado 17 en el Teatro Fundidora de la norteña ciudad de Monterrey, y el domingo 18 en la Plaza de Guadalajara, al occidente del país azteca.
Fuentes trascendidas revelaron que el cantante no regresará a su país hasta el 21 de agosto pues se quedará cumpliendo una serie de compromisos privados en la capital mexicana.
México es considerada, después de Cuba, la plaza latinoamericana por excelencia para Pablo Milanés y que podría ser igualada sólo por Chile si el trovador no se negara, por el momento, a regresar a ese país.
"Yo pisaré las calles nuevamente, de lo que fue Santiago ensangrentado, y en una hermosa plaza liberada, me detendré a llorar por los ausentes", sigue cantando Pablo pero insiste en no cumplir su promesa mientras Augusto Pinochet se mantenga al frente del ejército chileno.
"Lo vimos como uno de los cantores a los que, como diría un poeta, habría que arrancarle la voz para callarlo", comentó Pérez en Granma y reconoció que los últimos tiempos habían sido duros para la salud del artista.
De acuerdo con los partes médicos, Milanés padece de una "necrosis en la cabeza del fémur", pero desde hace más de una década en la isla no dejan de correr rumores bastante pesimistas sobre su estado de salud.
"Pablo está de vuelta, pero hasta cuando, eso nadie lo sabe", comentó a la salida del Teatro Carlos Marx, Raquel Gómez, arquitecta de 39 años, que desde hace 15 años nunca se ha perdido un concierto de Pablo Milanés en La Habana. (FIN/IPS/da/eg/cr-la/96) ITEM CLOSE
