El relator especial comisionado por Naciones Unidas (ONU) para investigar denuncias sobre tortura en Venezuela, Nigel Rodley, inició una serie de contactos con altos funcionarios, académicos y ONG para analizar la situación del país en esta materia.
La visita del funcionario de la ONU, la primera en su tipo que realiza a Venezuela, se produce en medio de un recrudecimiento de denuncias sobre el incremento de maltrato a personas detenidas y procesadas por la justicia venezolana.
"Esta primera visita de un relator de la ONU para la tortura, es a requerimiento nuestro", dijo este lunes el Miguel Angel Burelli, para aclarar que el gobierno venezolano no está tratando de solapar las denuncias sobre el tema.
"Lo que ocurre en Venezuela es que aquí hay más libertad de denuncia que en muchos otros países, y esto hace parecer como si se estuvieran produciendo constantemente nuevos agravios", dijo el alto funcionario venezolano.
El relator sostendrá encuentros con parlamentarios, jefes de los cuerpos de seguridad y visitará cárceles, después que durante el fin de semana pasado se reuniera con activistas de origanizaciones humanitarias.
Sin desconocer la devastadora situación de las cárceles venezolanas, Burelli citó a su vez tipificaciones de organismos internacionales que prueban que se ha mejorado en el manejo de los derechos humanos.
Para el Cofavic, Comité de Familiares de Víctimas del "Caracazo", estallidos sociales que sacudieron la capital en febrero de 1989, "en Venezuela el tema de los derechos no se ncia sobre los derechos humanos no sólo del gobierno sino de los ciudadanos", dijo a IPS su directora Liliana Ortega Mendoza.
"El incremento de los abusos policiales dentro de la fase de la detención preventiva ha crecido notablemente, y esto se ha dado porque hay una serie de leyes que no se han adaptado a la norma internacional", señaló.
Entre ellas, citó la detención de un sospechoso por ocho días, medida "que noestá acorde con la Convención Americana".
En materia de derechos humannos "hay un problema serio de impunidad", destacó, refiriéndose a las muertes ocurridas durante febrero de 1989, cuyas investigaciones aún se encuentran en fase de secreto sumarial.
Cofavic presentó a Rodley una serie de planteamientos, entre los que se incluyen las reformas del Código de Enjuiciamiento Criminal y del Código de Justicia Militar, la derogación de la ley de Vagos y Maleantes, y la eliminación de las "requisas vaginales" en las cárceles del país.
"En materia de abusos policiales la situación se mantiene igual", dijo por su parte el religioso jesuita Jesús Rodríguez, que trabaja con voluntarios en el Retén de Catia, en la capital, la cárcel más poblada del país.
"Lo que se sigue encontrando en las cárceles son unos policías irracionales, que maltratan a los presos sin que les importe dónde dan el golpe. Lo que ellos buscan es la eficiencia de la requicia", declaró Rodríguez a IPS. (FIN/IPS/co/dg/op-hd/96