La sinceridad de los discursos que pronuncian algunos candidatos a la Presidencia de Ecuador sobre problemas ambientales es cuestionada por votantes y especialistas cuando faltan aún tres meses para las elecciones.
La protección del ambiente, que al principio marcaba apenas diferencias entre los nueve candidatos que compiten por la jefatura del gobierno, se convirtió en uno de los aspectos más importantes del debate ideológico previo a las elecciones del 19 de mayo.
Para algunos, los programas de gobierno lucen un tanto homogéneos porque la línea entre izquierdas y derechas se tornó borrosa, y de ahí la necesidad de candidatos y asesores de apelar a cuestiones de interés general y, si es posible, de consenso comprobado.
Otros opinan que la naturaleza ofrece a Ecuador inmensas posiblidades, pero está siendo devastada a pasos agigantados por actos de depredación como la tala de bosques y las industrias camaronera y petrolera, lo que obliga a considerar los problemas ambientales como prioridad nacional.
"Nadie puede estar en contra de la protección al ambiente. Es un problema que preocupa a la sociedad y que hoy está muy de moda. Por eso los candidatos la usan como herramienta para sumar votos", comentó Simón Guerrero, estudiante de Ciencias Políticas de la Universidad Central de Quito.
Para Guerrero, estas cuestiones "se convirtieron en una razón de lucha para la mayoría de los jóvenes y adultos que algún día creyeron en los principios doctrinarios del socialismo", pues "es la mejor manera de enfrentar a los monopolios petroleros y a la 'oligarquía' en general".
El lanzamiento del ex conductor de programas de televisión Freddy Ehlers como candidato a la Presidencia "obligó a otros aspirantes a incluir en sus programas políticos la protección del ambiente como principal polo de desarrollo", apuntó el analista de asuntos económicos Angel Espinoza.
Ehlers, candidato independiente que contó con apoyo de organizaciones indígenas y partidos de izquierda y centroizquierda, es conocido por sus campañas televisivas en favor de la preservación del ambiente y fue el primer aspirante a la Presidencia que puso el asunto sobre la mesa.
"El pilar ecológico es tan importante como la economía, la educación y la ética, los otros tres pilares de mi propuesta de gobierno", manifestó Ehlers.
Según las tres principales empresas encuestadoras de Ecuador, Ehlers ocupa el segundo lugar en cuanto a intención de voto, por debajo del candidato derechista Jaime Nebot, del Partido Social Cristiano. Si esta situación se mantiene, ambos competirían en una segunda vuelta electoral.
Valerio Greffa, dirigente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador, organización que agrupa a representantes de las 10 etnias nativas, opinó que el problema ambiental "no es relevante" para estos pueblos.
"Nosotros vivimos en contacto permanente con la naturaleza y sabemos de sus problemas, pero tenemos tantas necesidades que por el momento no podemos preocuparnos por la ecología", dijo Greffa.
El ambiente "es más un asunto de la gente que vive en las grandes ciudades", agregó.
Espinoza explicó que cada candidato abordó las cuestiones ambientales de acuerdo con sus diferentes perfiles.
"Unos se inclinan hacia los beneficios económicos que significa la protección de la biodiversidad y otros lo hacen hacia el problema moral de la explotación inconsciente de la naturaleza", dijo en ese sentido.
En todo caso, opinó Espinoza, "el problema existe y si los políticos lo extrajeron de las demandas de la sociedad, con el objeto de obtener más votos".
"De cualquier manera, es un logro", apuntó. (FIN/IPS/mg/mj/ip en/96)
