La certificación que otorgó Estados Unidos a México en materia de combate al narcotráfico "no altera las politicas antinarcóticos" del gobierno del presidente Ernesto Zedillo, señalaron hoy fuentes oficiales, tras reiterar sus críticas contra ese proceso.
La decisión no modifica las prioridades del gobierno mexicano, que "continuará subrayando la importancia de privilegiar un enfoque integral que ataque por igual la demanda, distribución, tránsito y producción", de drogas, dice un comunicado del gobierno.
Tras realizar un análisis de la lucha antinarcóticos en 31 países, Washington informó que en América latina certificó plenamente a los gobiernos de México, Perú y Bolivia, que lo hizo con reservas al de Paraguay, y que "descertificó" a Colombia.
El gobierno de Zedillo dijo estar preocupado "acerca del impacto que procesos como el de la certificación pueden producir en la creciente y efectiva cooperación bilateral que existe entre México y Estados Unidos".
Autoridades, diputados y empresarios mexicanos consideran que el proceso de certificación practicado por Washington desde hace una década viola la soberanía de los países involucrados.
El aval otorgado al gobierno de México coincidió este viernes con dos importantes operativos de policía y militares realizados en la capital y en la ciudad de Tijuana para capturar a miembros de un cártel de traficantes de drogas, objetivo que no se cumplió. (FIN/IPS/dc/jc/ip/96)