Cantando "Allah Akhbar", Dios es Grande, miles de mujaidin, los guerreros del Islam, desfilaron por las calles de esta capital en direccion al aeropuerto, donde son embarcados para ir a combatir a los rebeldes en el sur del pais.
Los mujaidin, que en su mayoria tienen apenas 18 anos de edad, se muestran honrados de recibir el honor del martirologio en el frente de guerra meridional.
"Estamos listos para morir en el sur", dijo Osman Yusuf, de 20 anos, levantando un fusil de asalto y haciendo el signo de la victoria con la mano.
Yusuf forma parte de uno de los 82 grupos de voluntarios que, segun el diario estatal "al Ingaz al Watani", han sido transportados al sur para combatir a los no musulmanes.
La campana para enrolar a las milicias aumento en octubre cuando el rebelde Ejercito Popular de Liberacion de Sudan (SPLA) revirtio las conquistas gubernamentales y durante la estacion seca se apodero de una cadena de ocho estrategicas guarniciones gubernamentales a lo largo de la frontera con Uganda.
Furioso por las perdidas, el gobernante de Sudan, general Omar Hassan al Bashir, acuso a Uganda y Eritrea de estar detras de la ofensiva del SPLA, y proclamo que iba a movilizar un millon de hombres para combatir el movimiento rebelde.
Desde entonces, miles de jovenes voluntarios fueron llamados a centros de entrenamiento en el norte de Sudan. Los grupos de apoyo incluyen mujeres que llevan faldas por debajo de la rodilla y tunicas "hijab"en la cabeza.
Las mujeres, tambien entrenadas en tecnicas de combate, hornean pan y bizcochos para los mujaidin en el frente.
Aquellos exceptuados de viajar al sur, debido a enfermedad o edad avanzada, contribuyen materialmente. Uno de ellos, un obrero, dono su salario anual para lo que cree es la causa de la Jihad (guerra santa), segun la television estatal en Omdurman, una de las tres ciudades que constituyen la capital sudanesa.
Sudan, un estado pivote entre Africa negra y el mundo arabe, padece los dos mayores problemas del continente: odios raciales y religiosos.
La guerra civil, que se viene arrastrando desde 1955, se agudizo luego que Jartum impuso la Sharia islamica en 1983, que relego a la poblacion no musulmana del sur de Sudan, donde vive el 35 por ciento de los 27 milloones de habitantes del pais, a una condicion de ciudadanos de segunda categoria.
La marginacion de los no musulmanes es rechazada por Hassan al Turabi, lider del Frente Islamico Nacional (INF), que es el principal soporte de las milicias islamicas.
Al Turabi demando "en que otro pais las minorias, como los cristianos en Sudan, que son el cinco por ciento, llegan a la vicepresidencia, al parlamento, a los ministerios en todo el pais".
"En Estados Unidos, si un candidato es catolico le resulta muy dificil llegar a la presidencia. John Kennedy lo logro pero fue asesinado", apunto Al Turabi, considerado el lider de facto de Sudan.
Como muchos otros, el dirigente perdio hace dos anos a un hermano, que era medico, a raiz de los combates en el sur.
Alrededor de 1,5 millones de personas han perecido durante la guerra civil a raiz del propio conflicto o por la hambruna que provoco. Mas de tres millones de desplazados dejaron sus hogares en el sur.
Para esa gente, la paz es un sueno lejano. Dos ex presidentes, Jimmy Carter, de Estados Unidos, y Olusegon Obasanjo, de Nigeria, fracasaron en su intento de mediar la paz en Sudan.
El SPLA, que reinicio la guerra civil en 1983, arguyo que la suya no es una rebelion secesionista sino estaba luchando por todas las areas subdesarrolladas de Sudan, marginalizadas por un cliche politico y economico establecido en Jartum.
Una division en el movimiento en 1991, tras su expulsion de bases en Etiopia, no solamente debilito al SPLA sino obligo a su principal dirigente, John Garang, a adoptar la consigna independentista del sur exigida por las bases.
La lucha entre las facciones rebeldes permitio a Jartum de rechazar al SPLA que, en su momento, controlo el 90 por ciento del sur del pais con excepcion de tres capitales provinciales.
La ofensiva de esta temporada marco un vuelco para el ejercito de Garang.
No obstante, para los mujaidin la paz solo podra concretarse cuando "los infieles" sean derrotados. "Esta es precisamente nuestra mision", afirmo Osman Yusuf, momentos antes de embarcarse en un avion de transporte hacia el sur. (FIN/IPS/tra- en/mn/oa/ego/ip).
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