El presidente de Honduras, Carlos Roberto Reina, inauguro hoy la ultima fase de remocion de 30.000 minas colocadas en los anos ochenta en la region oriental del pais, en la frontera con Nicaragua.
El trabajo esta a cargo de la Organizacion de Estados Americanos (OEA), la Junta Interamericana de Defensa (JID) y las Fuerzas Armadas de Honduras.
Unos 120 soldados del ejercito nacional, entrenados por expertos militares de Estados Unidos, Colombia, Brasil y la Guardia Nacional de Costa Rica, realizaran las tareas de desminado.
Reina manifesto que tras concluir las primeras dos fases de la operacion, se ingreso "en la mas decisiva, que es la de quitar las minas y borrar asi otro capitulo mas de la triste historia" que signo a este pais en los ultimos anos.
"Pronto podremos decir al mundo que Honduras es un pais limpio de minas, porque una preocupacion y prioridad de mi gobierno ha sido atender este problema que tanto dano ha dejado entre las comunidades afectadas por la puesta de estos explosivos", dijo.
Las casi 30.000 minas colocadas a lo largo de la frontera con Nicaragua tambien provocaron "deforestacion, pobreza, migracion involuntaria y muchas perdidas economicas", afirmo.
En la decada pasada, el territorio hondureno fue utilizado por grupos insurgentes extranjeros, como la "contra" nicaraguense y la guerrilla salvadorena.
Segun la OEA, la mayoria de las minas colocadas en America Central estan en Honduras, diseminadas en las fronteras con El Salvador y Nicaragua.
De alli que las labores de desminado se iniciaran en la region de Jamastran, en el oriental departamento de El Paraiso, uno de los mas afectados por la presencia de explosivos.
Las minas diseminadas en esa zina fueron colocadas por la desaparecida Resistencia Nicaraguense, opuesta al regimen sandinista de la epoca y que opero en territorio hondureno con apoyo del gobierno nacional de entonces. Su financiamiento y entrenamiento corrio por cuenta de Estados Unidos. (FIN/IPS/tm/dg/ip/95
