Los campesinos sin tierra de Brasil continuaran ocupando propiedades improductivas, en especial las que pertenecen a deudores del Banco de Brasil, para acelerar la reforma agraria en el pais.
"Son 1.227 estafadores cuyas tierras son suficientes para asentar a mas de 200.000 familias", senalo Joao Pedro Stedile, uno de los coordinadores del Movimiento de los Sin Tierra, que desde el lunes celebra su tercer congreso nacional en Brasilia.
Los morosos con el Banco do Brasil, que concentra el credito rural, acumulan deudas por 2.300 millones de dolares, producto de creditos subsidiados y en muchos casos desviados para otros fines, indico.
Cerca de 5.000 campesinos de 22 de los 27 Estados brasilenos intervienen en el encuentro de los Sin Tierra, que estudia medidas para presionar a que les entreguen propiedades para trabajarlas.
La reforma agraria no responde a un planteo "ideologico, sino a una necesidad del pais", afirmo este martes el presidente de la Central Unica de Trabajadores (CUT), Vicente Paulo da Silva, en apoyo a los campesinos sin tierra reunidos en Brasilia.
En Brasil hay unos 12 millones de trabajadores carentes de tierra para producir, mientras dos por ciento de los propietarios concentran 56 por ciento de las tierras disponibles.
Hace falta voluntad "y coraje" para impulsar la reforma agraria, destaco el lider sindical.
El Movimiento de los Sin Tierra abarca actualmente a 17.421 familias de campesinos distribuidas en 87 campamentos, la mayoria ubicados en predios ocupados donde esperan un asentamiento definitivo.
Por medio de nuevas ocupaciones, el movimiento se propone que este ano unas 30.000 familias campesinas obtengan tierras.
Brasilia Araujo Neto, presidente del estatal Instituto Nacional de Colonizacion y Reforma Agraria, acogio la idea de destinar haciendas de deudores a nuevos asentamientos.
Pero es necesario que la propiedad ya este en manos del Banco do Brasil, senalo.
En lo que va de 1995 el instituto asento a 6.000 familias y debera hacer lo propio con otras 23.000 en los proximos tres meses, informo Araujo, prometiendo cumplir la meta de entregar tierras a 40.000 familias en este ano.
La reforma agraria del gobierno es "demasiado lenta", opinaron Vicente Paulo da Silva y los lideres del Movimiento Sin Tierra, justificando la tactica de ocupaciones de propiedades improductivas para acelerar el proceso. (FIN/IPS/mo/dg/ip-pr/95
