Los Estados Unidos lograron esta semana adelantarse a Europa en el complicado ajedrez de la integracion economica mundial, al conformar con otros 17 paises el tercer gran bloque comercial del planeta.
La puesta en marcha del foro de Cooperacion Economica de Asia y del Pacifico, mas conocido por su sigla inglesa APEC (en espanol seria CEAP), permite a los norteamericanos tener influencia estrategica en de dos de los tres principales bloques economico- comerciales que se estan conformando en el mundo.
Estados Unidos ya participan del Acuerdo de Libre Comercio de America del Norte (NAFTA en ingles y TLC en espanol), lo que deja a la Union Europea como el unico bloque donde el Tio Sam no tiene derecho a voto.
Pero la ventaja norteamericana en el complicado rompecabezas mundial de los pactos de libre comercio aun no significa que el presidente Bill Clinton haya logrado una victoria definitiva sobre los europeos, los pioneros en materia de reduccion de barreras comerciales.
La prisa norteamericana en poner en marcha el CEAP fue motivada basicamente por el temor de que las naciones asiaticas, que forman casi el 80 por ciento de la membresia del pacto, crearan un bloque propio, sin participacion de Estados Unidos. Malasia ya habia sugerido discretamente esta posibilidad hace dos anos.
El presidente Bill Clinton consiguio evitar que los Estados Unidos quedaran aparte, pero el CEAP aun no ha logrado sobrepasar el marco de "un grupo de extranos tentando formar una familia", conforme una ironica comparacion del experto economico Mark Magnier, del diario norteamericano Journal of Commerce.
De hecho, las 18 naciones del nuevo pacto economico de Asia y del Pacifico, tienen muy pocas cosas en comun, salvo compartir un oceano.
En un mismo bloque conviven potencias economicas como Estados Unidos y Japon, a la par de la poco desarrollada Nueva Guinea. Hay gigantes territoriales como China y miniestados como Singapur y el sultanato de Brunei. Hay tambien vecinos tan distantes como Chile y Tailandia o Mexico y Nueva Zelandia.
El interes norteamericano en impedir un desgarre de los tigres asiaticos bajo control fue tal, que Washington decidio cerrar los ojos a las denuncias de violaciones de derechos humanos en paises como China e Indonesia.
Tambien acepto clausulas proteccionistas exigidas por Malasia, Corea del Sur y Taiwan, sin tomar en cuenta las exigencias mucho mas duras de la recien firmada Ronda Uruguay del Acuerdo General de Aranceles y Comercio (GATT), impulsado por los Estados Unidos.
El nuevo bloque economico presenta numeros impactantes. La suma de los productos internos brutos de los 18 paises se acerca a los seis trillones de dolares (un numero con 13 digitos y equivalente a la mitad del PIB planetario), la poblacion alcanza 40 por ciento del total mundial y sus socios controlan 40 por ciento del comercio internacional.
Pero la fuerza de las estadisticas senala mas potencialidades que realidades economicas concretas.
Las diferencias entre las politicas comerciales de los socios de la CEAP aun son muy grandes. La armonizacion arancelaria tomara por lo menos 25 anos, segun quedo acordado en la reunion cumbre de esta semana en Bogor, Indonesia.
Los paises ricos, liderados por Estados Unidos, Japon, Hong Kong, Australia y Nueva Zelandia, se comprometieron con un plazo mas corto, 15 anos, pero por el momento son mas promesas que hechos.
Otro elemento de duda es la esperada disputa entre Estados Unidos y Japon por adquirir poder politico dentro de la CEAP, segun preveen norteamericanos.
Los Estados Unidos liderarian a Canada, Mexico, Chile, Australia, Nueva Zelandia y Filipinas. Japon tiene fuerte ascendencia sobre Tailandia, Indonesia, Malasia, Singapur, Brunei, Taiwan, Papua Nueva Guinea y Corea del Sur. China y Hong Kong pueden ser el fiel de la balanza.
Mexico, Estados Unidos y Canada, los socios del TLC, participan ahora en dos bloques economicos mundiales, mientras Chile es un caso curioso porque decidio asociarse a paises muy lejanos, casi antipodas, antes de buscar la integracion economica con sus vecinos en America Latina.
Las dudas e incognitas en torno al CEAP han causado excepticismo en Washington.
El democrata Ernest Hollings, presidente de la Comision de Comercio del Senado norteamericano formulo chistes sobre el nuevo pacto al definirlo como "cuatro adjetivos en busqueda de un sustantivo" (alusion a las cuatro palabras de la sigla CEAP).
Trudy Rubin, analista economica de la cadena de periodicos Knight-Ridder afirmo que "el CEAP es muy bueno para poner a los lideres de Asia y del Pacifico a discutir, pero ir mas alla de esto significa crear problemas que no valen la pena enfrentar".
Los asiaticos, por su lado, reaccionaron como era esperado. Muchas sonrisas, cortesias, declaraciones optimistas, pero al mismo tiempo una cautela digna de Confucio. (Fin/IPS/CC/mc/ie/94). —