Autoridades, expertos y analistas mexicanos coincidieron hoy en manifestar su preocupacion ante la votacion este martes, en el estado de California, Estados Unidos, de una ley que negaria los servicios sociales a los trabajadores indocumentados y sus familias.
Jose Angel Gurria, vocero diplomatico del oficialista Partido Revolucionario Institucional, en el poder desde 1929, mostro alarma "ante la posibilidad de que el ambiente de xenofobia que vive California se generalice como bandera politica en Estados Unidos".
La consulta californiana sobre la llamada "propuesta 187" durante los comicios de este martes se efectua simultaneamente con las elecciones generales legislativas en Estados Unidos.
Gurria dijo que "desde el punto de vista costo-beneficio, la aprobacion de la iniciativa racista seria perjudicial para los contribuyentes del estado sureno norteamericano".
Explico que resultarian mas caros los controles de vigilancia que los ahorros que se lograrian impidiendo el acceso a los servicios medicos y educacionales a los indocumentados y sus hijos.
El investigador Lorenzo Meyer, especialista de la institucion de estudios superiores El Colegio de Mexico, opino que "la ley discriminatoria propuesta en California podria generar y favorecer epidemias, marginacion sociocultural y episodios de violencia, al pretender una sociedad de varios pisos".
A juicio de Meyer se trata de una iniciativa que refleja "una demagogia conservadora, reaccionaria y racista, que juega con los sentimientos xenofobicos de una parte de la poblacion para ganar votos irracionales, a sabiendas de que la propuesta es absurda".
Segun los ultimos sondeos sobre voluntad de sufragio, quienes estan a favor de la iniciativa contra los migrantes irregulares disminuyeron su ventaja sobre los que la consideran racista e inconveniente, pero siguen siendo mayoria.
El presidente de Estados Unidos, Bill Clinton, afirmo el jueves que en caso de aprobarse la ley discriminatoria en California la declarara inconstitucional, lo que impide aplicarla, pero el tema preocupa en Mexico por sus proyecciones futuras de caracter politico.
Se calcula en mas de tres millones el numero de asalariados ilegales y sus familiares, principalmente mexicanos, que trabajan y residen en Estados Unidos, donde van en busca de empleo y de sueldos superiores a los que se perciben en su nacion de origen.
Los migrantes cubren puestos de trabajo generalmente rechazados por los habitantes del pais anfitrion y perciben sueldos inferiores a los que rigen en el, pero ganan mucho mas que en sus lugares de procedencia y poseen hasta ahora ensenanza y hospitales asegurados.
"Si se aprueba manana (martes) la propuesta, el miercoles, cuando abran sus puertas las cortes, la llevaremos a juicio de inconstitucionalidad", declaro a la prensa Richard Babcock, coordinador californiano de la campana contra la iniciativa.
En tanto unas 500 personas marcharon en la ciudad de Tijuana, fronteriza con Estados Unidos, desde el Palacio Municipal hasta la garita limitrofe, donde mantienen un planton para rechazar la iniciativa, a la que calificaron de "racista y xenofobica".
Manifestaciones similares se desarrollan desde hace varias semanas a lo largo de los 3.200 kilometros de la linea internacional comun y frente a la embajada de Estados Unidos en la apital mexicana.
Este lunes tuvo lugar una demostracion de protesta ante esa representacion diplomatica y para el martes se preve una concentracion frente al Congreso de Mexico en demanda de "una postura mas energica contra la propuesta 187 en California".
Mediante la denominada "Operacion Dignidad", impulsada por el gobierno mexicano y diversas organizaciones sociales, se realiza desde hace un mes un boicot al comercio que financio la iniciativa en la franja fronteriza estadounidense, lo que redujo notablemente sus ventas.
En los puestos aduaneros entre ambos paises los activistas levantan carteles con leyendas tales como: "no cambiemos patria por hamburguesas. No cruces, no compres."
Carlos Guzman, coordinador turistico en Tijuana, dijo que el gobierno ayudara mediante su programa "Paisano" a los que sean deportados y orientara y protegera a los que ilegalmente intentan cruzar y a quienes viven en Estados Unidos de modo legal".
El analista Roberto Blancarte dijo a su vez que el problema de la propuesta 187 "muestra que el nuevo idolo del mercado supuestamente libre disfraza apenas un darwinismo social basado en la supervivencia del mas apto, con desprecio por criterios eticos o de solidaridad".
Mediante el Tratado de Libre Comercio de America del Norte (TLC) Canada, Estados Unidos y Mexico forman desde el 1 de enero de 1994 una de las mayores zonas libres mercantiles del mundo, con 375 millones de habitantes y un producto anual de siete billones de dolares.
Para Blancarte, "la iniciativa 187 revela, ademas de racismo y xenofobia, una incomprension absoluta de la magnitud del desafio mundial, tanto en materia ambiental como de desarrollo social", porque los seres humanos constituyen el centro de las preocupaciones relacionadas con el desarrollo sostenible." (FIN/IPS/emv/dg/ip-ie-hr/94
