La sangre de drago, considerada por los indígenas amazónicos desde hace cientos de años una medicina milagrosa, es utilizada por laboratorios internacionales para crear nuevos medicamentos capaces de curar varias enfermedades.
Hasta hace algunos años, la sangre de drago, un látex rojo extraído del árbol croton, era utilizada por los indígenas y vendida exclusivamente en mercados y tiendas naturistas de Perú y Ecuador, donde su uso más común es en la cura de la tos, el catarro, problemas pulmonares, diarrea, úlceras estomacales, heridas y herpes.
Según una encuesta entre extractores de sangre de drago en la región amazónica del Alto Napo, en Ecuador, 29 por ciento de éstos venden el látex a quien llega a comprarlo, 53 por ciento a empresas comerciales, y 18 por ciento de las dos maneras.
Sólo en los últimos años la sangre de drago ha comenzado a comercializarse en el mercado botánico internacional, y en una rápida recorrida por Internet se puede encontrar varias compañías extranjeras que la distribuyen.
En 1989, Lisa Conte fundó en California la compañía Shaman Pharmaceuticals Inc., con la premisa de que el aprovechamiento del conocimiento indígena tradicional acerca de las plantas medicinales podría ayudar a encontrar nuevos compuestos curativos.
Apoyada en el conocimiento de pueblos de la Amazonia y en la investigación de sus científicos, Shaman logró elaborar dos medicamentos a partir de sangre de drago: Provir, una medicina oral contra un virus respiratorio, y Virend, remedio contra el herpes. Sin embargo, esos productos no fueron finalizados y no alcanzaron el mercado.
Según portavoces de la empresa, Shaman Pharmaceuticals comenzó su investigación sobre el látex del croton mucho antes de llegar a Ecuador
"El SP-303, un compuesto de estructura molecular no sintetizable extraído de la sangre de drago, fue encontrado y patentado en 1990, antes de la primera expedición al país, donde se realizaron investigaciones etnobotánicas para verificar sus propiedades medicinales", aseguraron los portavoces.
El laboratorio también fabrica el suplemento nutricional SB- Normal Stool Formula, un extracto estandarizado del látex de sangre de drago.
"Este producto contiene el principal ingrediente de sangre de drago patentado por Shaman, SP-303, que previene la pérdida de líquidos en el intestino y promueve la formación de fluidos normales, sin los efectos de algunos fármacos que acaban con la movilidad intestinal", señalaron.
Cada tableta de 350 miligramos contiene 250 miligramos de SP- 303 y 100 miligramos de un antioxidante encontrado en frutas y vegetales.
Además del SP-303, en Estados Unidos hay otros tres componentes de sangre de drago, patentados por otras compañías, pero la planta productora del látex no ha sido patentada.
"Ninguna patente prohibe el uso tradicional del látex ni la venta en ningún país de la corteza, los extractos o tabletas", aclararon los representantes de Shaman.
La preocupación de los ambientalistas en cuanto a la sangre de drago consiste en que la recolección y cosecha de grandes volúmenes con fines comerciales provoca la muerte de los árboles, lo que pone en riesgo la especie.
Para los portavoces de Shaman, es importante que la discusión sobre sustentabilidad, conocimiento indígena y derecho a los recursos naturales "tome en cuenta el crecimiento del mercado internacional de botánicos".
Hay dos métodos de recolección. El primero supone la extracción de todo el látex, para luego talar el árbol, y el segundo, un sangrado constante, como ocurre con el caucho.
"El más utilizado en Colombia, Perú y Ecuador es el talado, y nuestros estudios concluyen que es el más sustentable para una producción a gran escala como la que exige la industria farmacéutica", comentaron los representantes de la empresa.
Según una investigación independiente realizada en la nororiental provincia de Napo, Ecuador, 66 por ciento de los extractores talan los árboles para obtener el látex, 28 por ciento utilizan el método de sangrado y seis por ciento emplean los dos sistemas.
"El árbol de la sangre de drago no se regenera para permitir un sangrado continuo de látex, por eso fue escogido el método de extracción total y talado", señalaron los portavoces, y aseguraron que "Shaman ha financiado la reforestación de aproximadamente 300.000 árboles de croton".
Shaman mantiene conversaciones con el Ministerio del Ambiente de Ecuador para la firma de un contrato de acceso a recursos genéticos, que sería el primero de ese tipo entre una empresa privada y el Estado ecuatoriano.
"Nuestra compañía es la primera en pedir permiso para acceder a recursos genéticos, pero no quiere llegar a esa información, sino sólo comprar sangre de drago a las comunidades y microempresas que quieran venderla como recurso forestal no maderable, esencialmente como una mercancía", indicaron los portavoces.
Los representantes de Shaman lamentan no haber recibido del gobierno ecuatoriano el mismo tratamiento que otras compañías.
Aunque la información utilizada por Shaman para aislar el compuesto químico de la sangre de drago no procede originalmente de Ecuador, el gobierno interpreta los Acuerdos de Cartagena en su forma más estricta y considera que cualquier uso de un producto natural o subproductos es una forma de acceder a información genética", señalaron
"Lo peculiar de ese criterio es que a otras compañías se les permite comprar plantas medicinales y otros productos naturales de Ecuador", aseguraron.
Actualmente, Shaman espera que Ecuador complete su legislación sobre acceso a recursos genéticos, algo que, según el Ministerio del Ambiente, se lograará a fines de año. Se trata de la regulación de los términos del Acuerdo de Cartagena.
"En ese momento, el Ministerio concluirá su evaluación de la propuesta presentada por la empresa para firmar el acuerdo, que permitirá comprar látex de sangre de drago en Ecuador, culminando un proceso de muchos años", dijeron los portavoces.
Anteriormente el Ministerio de Agricultura y el Instituto Nacional Forestal y de Areas Silvestres y Naturales (Inefan), otorgaron a Shaman permisos de exportación de sangre de drago, aunque ésta no compra ninguna planta en Ecuador desde 1994.
Los representantes de la compañía aseguraron que ésta destina 15 o 20 por ciento del costo de sus expediciones etnobotánicas a cubrir necesidades de comunidades participantes, y otorga apoyo financiero y técnico a centros de medicina tradicional e instituciones de investigación.
"Cuando los productos Shaman sean rentables se destinará un porcentaje aún no determinado de los beneficios a los grupos indígenas y a los países huéspedes con los que la compañía trabajó", prometieron las fuentes.
Según un informe del diario El Comercio, de Quito, 13 plantas medicinales andinas, entre las que se cuenta la sangre de drago, están en riesgo de extinción, un hecho que demuestra la necesidad de una protección legal efectiva, para conservarlas. (FIN/IPS/jm/ap/he en/99